La tranquilidad de una tarde soleada en Sesma, Navarra, se vio interrumpida por un momento de tensión y risas nerviosas durante la celebración de sus Fiestas Patronales. Xabier Eguía, reportero del programa “Quédate” de ETB2, se encontraba en plena transmisión en vivo, cubriendo los festejos taurinos, cuando una vaquilla decidió tomar protagonismo en la escena.

Eguía, situado tras la barrera de seguridad, conversaba animadamente con la presentadora del programa, Leire Martínez, ajeno a la inminente irrupción de la res. De repente, y ante la mirada atónita de los espectadores, un hombre del público lo tomó por la cintura, prácticamente arrastrándolo al centro del recinto, colocándolo directamente en la trayectoria de la vaquilla.

Las imágenes, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, muestran el momento exacto del impacto. La vaquilla embistió a Eguía, derribándolo al suelo. La expresión de sorpresa y desconcierto del reportero era palpable. Por unos segundos, reinó un silencio incómodo en el plató y entre la audiencia. El propio Eguía confesó más tarde que, en ese instante, creyó que se trataba de un toro de lidia y temió por su integridad física. Desconocía por completo que se trataba de una de las tradicionales "bromas" de las Fiestas de Sesma, donde la participación del público y las situaciones inesperadas forman parte del espectáculo.

Afortunadamente, la vaquilla no era un toro bravo, y Eguía pudo levantarse rápidamente y comenzar a correr, aunque visiblemente conmocionado. La intervención de los presentes fue clave para alejar al animal de la zona y evitar que la situación pasara a mayores. El público, que momentos antes había contenido la respiración, estalló en aplausos y ovaciones, alivio y diversión se mezclaban en el ambiente.

A pesar del susto, Eguía demostró una gran profesionalidad. Tras unos instantes para recuperar el aliento y el composure, retomó la conexión en directo con Leire. Con una sonrisa nerviosa y una dosis de humor, confesó: "Me he jugado el pescuezo (…) Leire, ya te he dicho, que me ha subido el PH navarro y aquí me quedo".

Este incidente, que podría haber terminado de forma mucho peor, se convirtió en una anécdota divertida que quedará grabada en la memoria de las Fiestas de Sesma y en la trayectoria profesional de Xabier Eguía. Una muestra más de cómo las tradiciones populares, en ocasiones, pueden deparar sorpresas inesperadas, y de la capacidad de adaptación y buen humor de los profesionales de la comunicación. Sin duda, una historia que se seguirá contando en los próximos años, aderezada con las imágenes que ya circulan por la red, testimonio de un momento singular en la historia de la televisión navarra. La pregunta que queda en el aire es si la “broma” del espontáneo que arrastró a Eguía al centro del recinto fue premeditada o simplemente fruto de la euforia del momento. Sea como fuere, el incidente ha generado un debate en redes sociales sobre los límites del humor y la seguridad en los eventos festivos.