¡La ropa acumulada clama por un rayo de sol! Las recientes lluvias en el Valle de México nos han dejado un panorama familiar: calles inundadas, tráfico caótico y… ¡montañas de ropa esperando su turno en los tendederos! Si eres de los miles de capitalinos que, como buena tradición, prefieren el sol para secar su ropa, seguramente has sentido la frustración de ver cómo el fin de semana se acerca y las nubes no dan tregua. Y es que, seamos sinceros, ¿quién quiere arriesgarse a que un aguacero repentino arruine el ciclo de lavado y deje la ropa con ese olor a humedad que tanto detestamos?

Las secadoras, aunque una opción viable, no siempre son accesibles para todos los bolsillos. Además, ese mito (o realidad, según la experiencia de cada quien) de la ropa encogida o maltratada por la secadora, nos hace preferir el buen y confiable sol. Pero, ¿qué hacer cuando el astro rey decide esconderse tras las nubes?

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) pinta un panorama un tanto desalentador para este fin de semana. Un canal de baja presión, aunado a la humedad proveniente del Pacífico y el Golfo de México, amenazan con descargar fuertes lluvias en el centro del país, incluyendo nuestra querida Ciudad de México. Y no solo eso, también se prevén posibles inundaciones, deslaves y –para añadirle dramatismo al asunto– bajas temperaturas y bancos de niebla en zonas altas como el Ajusco. ¡Casi un escenario apocalíptico para la ropa tendida!

Ante este pronóstico poco alentador, la pregunta del millón es: ¿cuándo podremos lavar y, sobre todo, secar nuestra ropa? Después de un minucioso análisis del pronóstico del SMN, y tras consultar con nuestro equipo de expertos en meteorología (léase: la señora del puesto de periódicos que siempre le atina al clima), hemos llegado a la siguiente conclusión: la mañana del viernes 29 de agosto se presenta como la ventana de oportunidad ideal. Las probabilidades de lluvia son considerablemente menores, lo que nos da un margen –aunque pequeño– para tender la ropa y rogarle al universo que el sol se apiade de nosotros.

Si la montaña de ropa no te permite esperar hasta el viernes, podrías considerar lavar pequeñas cantidades el sábado y domingo por la mañana, ya que se prevén lluvias principalmente por la tarde. Eso sí, te recomendamos estar al pendiente del cielo y tener un plan B (como tender la ropa dentro de casa o recurrir a la plancha) en caso de que las nubes decidan descargar su furia.

En resumen, la batalla contra la ropa sucia continúa en la CDMX. La lluvia ha declarado la guerra, pero armados con el pronóstico del tiempo y una buena dosis de optimismo, ¡saldremos victoriosos! Manténganse al tanto de las actualizaciones del clima y recuerden: ¡la ropa limpia y seca es un derecho fundamental! ¡No nos dejemos vencer por las inclemencias del tiempo! Y si todo falla… ¡siempre podemos usar la misma ropa una vez más! (broma, ¡o no!).