
29 de agosto de 2025 a las 08:20
Alerta: Bacteria come carne en mariscos, 6 muertos
La sombra de la bacteria "come carne", Vibrio vulnificus, se cierne inquietante sobre Louisiana. Seis vidas segadas en lo que va del 2025, tras el consumo de mariscos contaminados, elevan la cifra de víctimas y la preocupación en la población. Treinta y cuatro casos confirmados de infección, el número más alto en una década en Estados Unidos, pintan un panorama alarmante que exige medidas inmediatas. El Departamento de Salud de Louisiana no escatima esfuerzos en su campaña de alerta, instando a la población a extremar las precauciones, evitando el consumo de mariscos crudos – particularmente ostras – y buscando atención médica inmediata ante la más mínima sospecha.
El origen de la amenaza parece estar en las propias aguas de Louisiana, desde donde las ostras infectadas se han distribuido no solo a lo largo y ancho del estado, sino que también han alcanzado restaurantes en Florida, ampliando el radio de riesgo. Este hecho subraya la importancia de la colaboración interestatal para controlar la propagación y garantizar la seguridad alimentaria a nivel nacional. No se trata de un problema aislado, sino de una cadena de suministro que requiere una vigilancia minuciosa en cada uno de sus eslabones.
La bacteria, silenciosa y letal, acecha en dos frentes: el contacto directo con agua contaminada a través de heridas abiertas, cortes, piercings o tatuajes recientes, y la ingesta de mariscos crudos o poco cocidos. En ambos casos, las consecuencias pueden ser devastadoras. Desde los síntomas iniciales, aparentemente benignos como vómitos y diarrea, la infección puede evolucionar rápidamente hacia una fascitis necrotizante, una enfermedad que destruye el tejido con una velocidad alarmante, pudiendo llevar a amputaciones e incluso la muerte si no se trata a tiempo.
La urgencia de la situación exige una respuesta contundente y coordinada. La información clara y precisa es la primera línea de defensa. Es crucial que la población comprenda los riesgos y sepa cómo protegerse. Lavarse las manos a conciencia después de manipular mariscos, cocinarlos completamente, y evitar el contacto de heridas abiertas con agua de mar son medidas sencillas pero vitales que pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) registran alrededor de 80,000 casos de enfermedad al año en Estados Unidos relacionados con Vibrio vulnificus. Esta cifra, aunque alarmante, nos recuerda que no se trata de un fenómeno nuevo. Sin embargo, el aumento de casos en Louisiana nos obliga a redoblar los esfuerzos de prevención. La temporada de calor, con sus temperaturas elevadas, crea el ambiente propicio para la proliferación de esta bacteria. Por ello, es fundamental mantener la vigilancia y la precaución, especialmente durante estos meses, para evitar que la sombra de la "come carne" siga extendiéndose.
Más allá de la alarma inmediata, es necesario abordar el problema de raíz. Investigar las causas de la contaminación, implementar controles más estrictos en la industria de los mariscos y reforzar la educación pública sobre la bacteria son pasos cruciales para prevenir futuras tragedias. La salud pública es una responsabilidad compartida, y solo a través de la colaboración entre autoridades, industria y ciudadanos podremos contener la amenaza del Vibrio vulnificus y proteger la vida de las personas.
Fuente: El Heraldo de México