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28 de agosto de 2025 a las 03:45
Victoria: Agua asegurada por 50 años
Ciudad Victoria celebra el inicio de una nueva era en el abasto de agua. Tras décadas de espera y anhelos, la segunda línea del acueducto “Guadalupe Victoria” es ya una realidad. Esta monumental obra, impulsada por el gobernador Américo Villarreal Anaya y respaldada por el gobierno federal de la presidenta Claudia Sheinbaum, no solo calmará la sed presente de la capital tamaulipeca, sino que asegurará el vital líquido para las generaciones venideras. Imaginen un futuro sin la preocupación de la escasez, un futuro donde el agua fluya con la misma constancia que el progreso de nuestra ciudad. Eso es precisamente lo que esta obra promete: tranquilidad y desarrollo para los próximos 50 años.
La inversión de mil 800 millones de pesos no solo se traduce en tuberías y cemento, sino en la materialización de un sueño largamente acariciado. Representa la visión de un gobierno comprometido con el bienestar de su gente, un gobierno que entiende que el acceso al agua es un derecho fundamental, no un privilegio. Los 54.7 kilómetros de la nueva línea, que conectarán la presa Vicente Guerrero con Ciudad Victoria, son la arteria que transportará vida y prosperidad a cada hogar.
Este proyecto, parte de los 17 que conforman el ambicioso Plan Nacional Hídrico, es un testimonio del trabajo conjunto entre los gobiernos federal y estatal. La sinergia entre ambas administraciones ha permitido que Tamaulipas se beneficie con más de 10 mil millones de pesos en infraestructura hidráulica, una cifra que habla por sí sola del compromiso con el desarrollo de la región. No se trata solo de agua, sino de una inversión integral que abarca también transporte, comunicación, energía y bienestar social.
La firma del convenio de colaboración entre el gobernador Villarreal Anaya y el director general de la Conagua, Efraín Morales López, sella un pacto por el futuro. Un pacto que garantiza no solo el suministro de agua potable, sino también su adecuado saneamiento, un elemento crucial para la salud y el bienestar de la población. Más de 350 mil victorenses se verán beneficiados directamente con esta obra, un número que se traduce en familias, en hogares, en un futuro más seguro y próspero.
La nueva línea, con su tubería de acero al carbón de 36 pulgadas, aportará un caudal adicional de 750 litros por segundo, un flujo vital que se sumará a los 1,500 litros existentes. Esto significa el fin de los tandeos, esas angustiantes interrupciones en el suministro que, especialmente durante la temporada de estiaje, llegaban a afectar el servicio hasta por 60 horas semanales. Imaginen la diferencia: un suministro constante, confiable, que les permita a las familias realizar sus actividades cotidianas sin la incertidumbre de la escasez.
Pero la segunda línea del acueducto no es una obra aislada. Se complementa con la construcción de una nueva planta potabilizadora, con una capacidad de 1,500 litros por segundo y una inversión superior a los 600 millones de pesos. Esta obra conjunta representa un salto cualitativo en la gestión del agua en Ciudad Victoria, un paso firme hacia un futuro donde el acceso a este recurso vital esté garantizado para todos.
La historia de esta obra se entrelaza con la historia de Tamaulipas. Hace 38 años, el ingeniero Américo Villarreal Guerra, padre del actual gobernador, inició la construcción de la primera línea del acueducto. Hoy, su hijo retoma ese legado y lo proyecta hacia el futuro, consolidando una obra que honra la memoria de su padre y asegura el bienestar de las futuras generaciones.
Este es un día histórico para Ciudad Victoria, un día para celebrar el triunfo de la visión, la perseverancia y el compromiso. Un día para agradecer a quienes hicieron posible este sueño y para mirar hacia el futuro con la certeza de que el agua, fuente de vida y progreso, seguirá fluyendo en nuestra ciudad.
Fuente: El Heraldo de México