
29 de agosto de 2025 a las 01:50
¡Oso goloso roba helado en California!
¡Un amante del helado como pocos! Imagínense la escena: la madrugada del domingo 17 de agosto, la quietud del Campamento Richardson en South Lake Tahoe, California, solo interrumpida por el sonido de… ¿un oso disfrutando de un postre helado? Pues sí, aunque parezca sacado de una película, la oficina del Sheriff de Eldorado confirmó este insólito acontecimiento. Un oso grizzly, de esos que imponen respeto con solo verlos, decidió que el mejor lugar para saciar su antojo era una heladería local.
Los oficiales, atendiendo a una llamada de auxilio, se encontraron con una imagen digna de un cuento: el enorme úrsido, con sus cientos de kilos de peso, detrás de la barra de servicio, dándose un festín de helado. No sabemos si revisó la carta de sabores con detenimiento, pero parece que tenía una clara preferencia por la fresa. ¿Quién podría culparlo? El refrescante sabor de este clásico helado es irresistible, incluso para los paladares más salvajes.
Lo más sorprendente es que, a pesar de su tamaño y fuerza, el oso, cariñosamente apodado "Fuzzy" por los oficiales, se mostró bastante dócil. No opuso resistencia a la hora de abandonar el local, aunque sí dejó claro su apego al delicioso postre. Según el reporte policial, Fuzzy mostró un interés particular, casi obsesivo, por un gran bote de helado de fresa. ¿Acaso planeaba llevarse el postre a casa para disfrutarlo con calma? Nunca lo sabremos.
Este peculiar incidente nos recuerda la importancia de la convivencia respetuosa con la fauna silvestre. Es fundamental asegurar que nuestros negocios y hogares estén protegidos para evitar este tipo de encuentros, que si bien en esta ocasión terminó con una anécdota divertida, podría haber tenido consecuencias menos agradables. Además, nos deja una valiosa lección: el helado de fresa es un placer universal, capaz de conquistar incluso a los osos más imponentes.
¿Se imaginan la cara de los dueños de la heladería al descubrir la escena? Seguramente, además de la sorpresa, sintieron un poco de envidia por Fuzzy, quien disfrutó de un banquete helado en la tranquilidad de la madrugada. Este episodio, sin duda, se convertirá en una leyenda local, la historia del oso goloso que conquistó el corazón de South Lake Tahoe y nos recordó que, a veces, las mejores historias son las más inesperadas. Y tú, ¿qué sabor de helado elegirías si fueras un oso en una heladería?
Fuente: El Heraldo de México