
28 de agosto de 2025 a las 07:05
Lenia Batres: Nuevo Plan Nacional de Justicia
La despedida de la ministra Yasmín Esquivel Mossa de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) estuvo marcada por fuertes declaraciones y una clara visión de lo que, a su juicio, debe ser el futuro del Poder Judicial en México. En un acto solemne, arropada por figuras clave del nuevo gobierno como la ministra electa María Estela Ríos y el próximo presidente de la SCJN, Hugo Aguilar, Esquivel Mossa no escatimó en críticas a la gestión saliente, calificándola de "desnacionalizante, facciosa, elitista y ciega ante la injusticia social". Sus palabras resonaron con fuerza en el Museo de la Ciudad de México, donde legisladores, magistrados, familiares e invitados especiales fueron testigos de un discurso cargado de significado.
La ministra saliente no se limitó a señalar las fallas del pasado, sino que trazó una ruta hacia lo que considera un Poder Judicial más justo y equitativo. Su propuesta central, la creación de un Plan Nacional de Justicia, busca coordinar los esfuerzos de las instituciones locales y federales en la búsqueda de un objetivo común: garantizar el acceso a la justicia para todos los mexicanos. Esta ambiciosa iniciativa, según explicó, involucraría a la Fiscalía General de la República, el Congreso de la Unión, las fiscalías estatales, la Comisión Nacional de Derechos Humanos y los poderes judiciales locales, conformando un frente común en la lucha contra la impunidad y la desigualdad.
La insistencia de Esquivel Mossa en la necesidad de un cambio profundo en el sistema judicial se fundamenta en su convicción de que el pueblo mexicano merece una nueva era de justicia, libre de corrupción, nepotismo y tráfico de influencias, males que, en su opinión, han lastrado al Poder Judicial durante años. Su llamado a la austeridad y a la transparencia refleja una preocupación por la legitimidad y la confianza ciudadana en las instituciones. "Adiós, poder judicial neoliberal", proclamó con firmeza, marcando un punto de inflexión y anunciando la llegada de una nueva etapa en la administración de justicia.
Más allá de las críticas y las propuestas, la ministra Esquivel Mossa hizo un recuento de su labor en la SCJN, destacando la votación de 2,734 asuntos en la Segunda Sala y en el Pleno entre enero de 2024 y agosto de 2025. Reconoció que quedaron pendientes 34 asuntos en la Segunda Sala y 33 en el Pleno, pero aseguró que los proyectos de sentencia correspondientes ya fueron entregados a los nuevos ministros para su consideración en septiembre. Este gesto de continuidad y responsabilidad institucional contrasta con la contundencia de sus críticas, demostrando que la búsqueda de la justicia no se detiene ante los cambios de gobierno.
La proyección de un video sobre la Reforma Judicial antes del discurso de la ministra añadió un elemento visual y simbólico al acto. Las imágenes sirvieron como recordatorio del camino recorrido y de los desafíos que aún quedan por delante. La despedida de Yasmín Esquivel Mossa no fue un simple adiós, sino una declaración de principios y una invitación a la reflexión sobre el futuro del Poder Judicial en México. Sus palabras, sin duda, resonarán en los pasillos de la Corte y en el debate público durante mucho tiempo. El tiempo dirá si sus propuestas se concretan y si la nueva era de justicia que ella vislumbra se convierte en una realidad para todos los mexicanos.
Fuente: El Heraldo de México