El PRI se prepara para la batalla legislativa. Con la firme convicción de ser la voz de un México que demanda atención, los senadores y diputados del Partido Revolucionario Institucional se reunieron en su tercera plenaria, bajo el liderazgo de Alejandro Moreno Cárdenas. Este encuentro, previo al arranque del segundo año de la 66 Legislatura, no es una simple reunión protocolaria, sino un crisol donde se forja la estrategia para defender los intereses de las familias mexicanas. Lejos de la resignación, el PRI se erige como un bastión de la democracia, dispuesto a analizar los grandes desafíos nacionales y a proponer soluciones concretas.

La unidad es la palabra clave que resuena en los pasillos del Comité Ejecutivo Nacional. Moreno Cárdenas ha hecho un llamado a la cohesión, a la firmeza y al compromiso inquebrantable. La defensa de la democracia y la federación son los pilares de su discurso, un discurso que busca resonar no solo en las cámaras legislativas, sino en cada rincón del país. El PRI se presenta como el partido de la experiencia, de la formación política, frente a la improvisación que, según sus palabras, amenaza el futuro de México. No se trata solo de ocupar un espacio en el Congreso, sino de impulsar propuestas que respondan a las necesidades reales de los ciudadanos.

En la voz de Rubén Moreira Valdez, coordinador de los diputados priistas, se cristalizan las prioridades: el federalismo, la República, salarios dignos y un presupuesto socialmente responsable para el 2026. Contundente, Moreira Valdez reiteró el rechazo a participar en la comisión presidencial para una reforma electoral, considerada innecesaria en este momento. La defensa de la ley, la democracia y la representación plural son líneas rojas que el PRI no está dispuesto a cruzar.

Desde el Senado, Manuel Añorve Baños, coordinador del Grupo Parlamentario, alza la voz en un momento crucial para el partido. Ante lo que describe como un acoso gubernamental, Añorve Baños no solo defiende al PRI como institución, sino que respalda con vehemencia a su dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas. "No estás solo", afirma, una frase que se convierte en el símbolo de la resistencia priista. La defensa del partido se presenta como la defensa de México, una lucha por la supervivencia política que se libra en el terreno legislativo.

La agenda de la plenaria es ambiciosa: salud, economía, seguridad, justicia, sistema electoral, presupuesto, campo y minería. Temas cruciales para el desarrollo del país que serán analizados a profundidad durante tres días de intenso trabajo. El objetivo es claro: definir una agenda legislativa sólida y coherente, que represente los intereses de la ciudadanía y marque el rumbo del PRI en el próximo periodo legislativo. La culminación de este encuentro, prevista para el jueves, promete la presentación de resolutivos que no solo reflejen la postura del partido, sino que también marquen la pauta del debate político en los meses venideros. El PRI se prepara para la batalla, con la esperanza de ser no solo un partido de oposición, sino una verdadera alternativa para México.