
27 de agosto de 2025 a las 20:15
¿Huevos con jamón o machacado? El desayuno ideal
Si eres de los que disfrutan de un desayuno contundente y lleno de sabor, seguramente te has encontrado con el dilema: ¿huevos con jamón o huevos con machaca? Ambos platillos son clásicos de la cocina mexicana, ofreciendo una combinación irresistible de proteínas y sabores que despiertan el paladar. Pero, ¿cuál de estas dos opciones es la más saludable? Desentrañemos este misterio culinario y exploremos las virtudes y desventajas de cada una.
El jamón, ese aliado versátil del desayuno, se presenta en diversas formas: cocido, serrano, curado… cada uno con su propio perfil nutricional. El jamón cocido, o tipo York, es el que generalmente acompaña a los huevos en el desayuno. Suave en sabor y textura, aporta una cantidad considerable de proteína, ideal para comenzar el día con energía. Si bien es cierto que su contenido calórico y graso es relativamente bajo en comparación con otros embutidos, la clave reside en elegir un jamón bajo en sodio y sin azúcares añadidos. De esta manera, nos aseguramos de disfrutar de sus beneficios sin comprometer nuestra salud. Imagina un plato humeante de huevos revueltos con jamón cocido picado, acompañado de unas rebanadas de pan integral tostado y un toque de aguacate… ¡Un desayuno completo y equilibrado!
Por otro lado, la machaca, ese tesoro culinario del norte de México, nos seduce con su sabor intenso y su textura inconfundible. Elaborada con carne de res deshebrada y seca, la machaca es una fuente rica en proteínas y hierro, nutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Su proceso de elaboración artesanal, sin conservadores artificiales, le otorga un valor añadido. Sin embargo, es importante tener en cuenta su contenido de sodio, que suele ser más elevado que el del jamón. Este detalle no debe desanimarnos, sino invitarnos a consumirla con moderación, especialmente si tenemos hipertensión o problemas renales. Una excelente manera de disfrutar de la machaca sin excesos es combinarla con vegetales frescos, como cebolla, tomate y chile, creando un platillo colorido y lleno de nutrientes.
A la hora de elegir entre huevos con jamón y huevos con machaca, no existe una respuesta única. La mejor opción dependerá de nuestras necesidades y preferencias individuales. Si buscamos una alternativa ligera y rápida, los huevos con jamón cocido bajo en sodio son una excelente elección. Si, por el contrario, nos apetece un sabor más intenso y una textura más sustanciosa, la machaca, consumida con moderación y combinada con vegetales, puede ser una opción deliciosa y nutritiva.
Más allá de la elección entre jamón y machaca, existen otras maneras de enriquecer nuestro desayuno con huevos. Podemos añadir espinacas, champiñones, jitomate o cualquier otro vegetal de nuestra preferencia para aumentar el aporte de vitaminas y minerales. También podemos experimentar con diferentes tipos de cocción: huevos revueltos, estrellados, poché… ¡Las posibilidades son infinitas!
En definitiva, la clave para un desayuno saludable y satisfactorio reside en el equilibrio y la variedad. Al elegir ingredientes de calidad, controlar las porciones y combinar diferentes grupos de alimentos, podemos disfrutar de nuestros platillos favoritos sin remordimientos y con la certeza de que estamos nutriendo nuestro cuerpo de la mejor manera posible. Así que, ya sea con jamón, con machaca o con cualquier otra combinación, ¡a disfrutar de un desayuno delicioso y lleno de energía!
Fuente: El Heraldo de México