Logo
NOTICIAS
play VIDEOS

Inicio > Noticias > Accidentes

22 de agosto de 2025 a las 22:35

Tragedia en China: Puente colapsa, 10 muertos

La tragedia se cierne sobre el río Amarillo. Un coloso de acero y hormigón, destinado a unir provincias y acortar distancias, se ha convertido en símbolo de dolor y pérdida. El puente Jianzha, una obra de ingeniería que prometía ser la segunda más larga de China, yace ahora fragmentado en las turbulentas aguas, tras el repentino colapso de uno de sus cables principales. La escena, captada en un video estremecedor, muestra la brutal rapidez con la que la estructura se desmorona, precipitándose al vacío y llevándose consigo las vidas de al menos diez trabajadores. Cuatro más permanecen desaparecidos, atrapados quizás entre los escombros sumergidos, mientras la esperanza se desvanece con cada minuto que pasa.

El eco de la catástrofe resuena con fuerza en todo el país. El puente Jianzha, primer paso ferroviario sobre el río Amarillo en la línea Sichuan-Qinghai, no era solo una obra de infraestructura, sino un símbolo de progreso y desarrollo. Su construcción representaba un hito en la ambiciosa red ferroviaria china, conectando regiones y facilitando el transporte de mercancías y personas. Ahora, se ha convertido en un trágico recordatorio de la fragilidad de las construcciones humanas y la importancia de la seguridad en cada etapa del proceso.

Las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para determinar las causas exactas del colapso. La agencia estatal de noticias Xinhua apunta a una falla en uno de los cables de acero como el detonante de la tragedia. El Diario del Pueblo, por su parte, informa que en el momento del accidente se encontraban en la obra quince trabajadores y un director de proyecto. La incertidumbre se cierne sobre el destino de dos de ellos, aún sin localizar.

Mientras tanto, cientos de rescatistas trabajan contrarreloj en una frenética búsqueda contra la corriente y el tiempo. Buzos especializados se sumergen en las turbias aguas del río Amarillo, mientras equipos de rescate rastrean las orillas en busca de cualquier señal de vida. La angustia de las familias de los desaparecidos se intensifica con cada hora que pasa, aferrándose a la débil esperanza de un milagro.

Este incidente plantea interrogantes cruciales sobre los protocolos de seguridad en las grandes obras de infraestructura. ¿Se siguieron todas las normativas? ¿Hubo algún fallo en la supervisión? ¿Se escatimaron recursos en la calidad de los materiales? Estas son preguntas que exigen respuestas claras y contundentes, no solo para esclarecer las circunstancias de esta tragedia, sino para prevenir futuros desastres. La seguridad de los trabajadores debe ser la prioridad absoluta en cualquier proyecto de construcción, y este doloroso suceso debe servir como un llamado a la reflexión y a la acción para garantizar que tragedias como esta no se repitan. El desarrollo no puede construirse sobre cimientos de dolor y pérdida.

Fuente: El Heraldo de México