La tragedia ha golpeado a la ciudad de Ñemby, Departamento Central de Paraguay, dejando una estela de dolor e indignación. Deisy Tamara Belén Bareiro Torales, una joven de tan solo 25 años, fue encontrada sin vida en su vivienda, víctima de un brutal asesinato que ha conmocionado a la comunidad. El caso, envuelto en una trama de engaños y traición, apunta a la posible complicidad de la pareja de Deisy, Fernando Montanía, y un hombre identificado como Rolando Martínez.

Olga Torales, madre de la víctima, clama justicia entre lágrimas. Con el corazón destrozado, ha relatado ante los medios la desgarradora experiencia de reconocer el cuerpo de su hija en la morgue judicial, donde, para añadir sal a la herida, se encontró cara a cara con los presuntos responsables. Según su testimonio, Fernando y Rolando se presentaron en el lugar fingiendo desconocimiento sobre las causas de la muerte de Deisy, una actuación que la madre considera una burla cruel e indignante.

Olga asegura que su hija no conocía a Rolando Martínez, y que este encuentro en la morgue fue la primera vez que se veían. Este detalle alimenta la hipótesis de un plan premeditado y una posible relación clandestina entre Fernando y Rolando. "El único secreto que tenía conmigo es que su pareja le pegaba", confesó Olga con voz quebrada, revelando un historial de violencia doméstica que ahora cobra un significado aún más trágico.

El informe del Dr. Pablo Lemir, encargado de la autopsia, describe un escenario de violencia extrema. Deisy sufrió graves lesiones en la cabeza y el rostro, un traumatismo craneoencefálico y facial que le causó la muerte. Las marcas en su cuerpo hablan de una agresión brutal: lesiones contusas en dientes y boca, cortes en la oreja, en los ojos, en la mano… Una imagen que dificilmente podrá borrarse de la mente de quienes la conocieron.

La madre de Deisy señala a Fernando como el principal sospechoso, argumentando que el joven retiró todas sus pertenencias de la vivienda tras el crimen, un acto que, a su juicio, revela una premeditación escalofriante. Además, Olga desmiente categóricamente las versiones difundidas por Fernando sobre un supuesto consumo de drogas por parte de Deisy, tachándolas de mentiras para desviar la atención de su responsabilidad.

La investigación, a cargo de la Policía Nacional de Paraguay, ha dado un giro crucial con la aparición de un video de seguridad. Las imágenes, captadas por cámaras cercanas a la vivienda de Deisy, muestran a Fernando entrando a la fuerza en la casa horas antes del hallazgo del cuerpo. Esta evidencia refuerza las sospechas contra él y añade una capa de misterio a un caso que ha conmocionado a la opinión pública.

La ciudad de Ñemby se encuentra en vilo, esperando que se haga justicia. La voz de Olga Torales, resonando con la fuerza del dolor de una madre, se ha convertido en el clamor de una comunidad que exige el castigo máximo para los responsables de este atroz crimen. "Solo justicia pido, una condena ejemplar. La pena máxima que le den para los dos", repite con firmeza, mientras la investigación continúa su curso en busca de la verdad y el esclarecimiento de los hechos que llevaron a la muerte de Deisy Tamara. ¿Se hará justicia? ¿Se revelarán todos los detalles de esta trágica historia? El tiempo y las investigaciones lo dirán.