
Inicio > Noticias > Entretenimiento
21 de agosto de 2025 a las 22:50
Katy Perry y el arrepentimiento de un mexicano en VLA.
La escena fue casi cinematográfica. Luces destellantes, el rugido ensordecedor de la multitud coreando los éxitos de Katy Perry, y de pronto, un silencio expectante. Orlando, un fanático regiomontano, irrumpe en el escenario, micrófono en mano, con la valentía –o la locura, según se mire– de hablar por todo un país. “En nombre de todo México, te ofrezco una disculpa por el programa Venga la Alegría”, resonaron sus palabras en el recinto, cargadas de un arrepentimiento colectivo que inundó las redes sociales meses atrás. Recordemos aquel fatídico 13 de noviembre de 2024, cuando la estrella pop, con su habitual brillo y energía, aterrizó en el set del matutino. Lo que prometía ser una visita llena de alegría y música se convirtió en un desfile de dinámicas incómodas y momentos dignos de la sección “Cringe” de internet. La sonrisa forzada de Katy, sus miradas esquivas, la palpable tensión en el aire… todo quedó registrado en videos y fotografías que se propagaron como la pólvora, convirtiéndose en el combustible de memes y chistes a costa de la cantante y del programa.
Ante la disculpa de Orlando, la respuesta de Katy Perry no se hizo esperar. Un simple “sí deberían disculparse” confirmó lo que muchos intuían: la experiencia en Venga la Alegría había sido, cuanto menos, desagradable. Una confesión que resonó con la fuerza de un trueno, validando el sentir de los internautas que, a través de hashtags y comentarios, habían expresado su indignación y vergüenza ajena por el trato recibido por la artista.
Sin embargo, la historia no termina ahí. Tras la breve pero contundente afirmación, Katy Perry, con la gracia y profesionalismo que la caracterizan, demostró su amor incondicional por México. “Pero saben qué”, continuó con una sonrisa que iluminó el escenario, “siempre volvería a México porque amo México. ¡Viva México!”. Una declaración que desató la euforia del público presente, transformando la atmósfera de tensión en una explosión de alegría y patriotismo. Las redes sociales, escenario de la crítica inicial, se inundaron ahora de mensajes de apoyo y cariño hacia la cantante, celebrando su grandeza y su inquebrantable vínculo con el país.
El gesto de Orlando, el fanático regiomontano, se convirtió en un símbolo. La representación de un México que, más allá de las torpezas y las fallas, sabe reconocer sus errores y pedir disculpas. Un acto de humildad que resonó profundamente en el corazón de Katy Perry y de millones de mexicanos. El incidente de Venga la Alegría, aunque incómodo, se transformó en una anécdota, en una prueba más del cariño y la conexión especial que existe entre la estrella internacional y su fiel público mexicano. Una historia que demuestra que, a pesar de los tropiezos, el amor y la música siempre triunfan. Y mientras el eco de "¡Viva México!" resonaba en el estadio, una cosa quedó clara: Katy Perry y México, una historia de amor que continúa escribiéndose.
Fuente: El Heraldo de México