El eco de la voz de Xava Drago, la icónica voz de Coda, resonará por siempre en los corazones de sus seguidores, a pesar del silencio que lo envuelve ahora. Su partida, a la temprana edad de 56 años, ha dejado una profunda huella en la escena musical mexicana, un vacío que difícilmente podrá llenarse. La batalla contra el cáncer gástrico, una lucha que enfrentó con valentía y que compartió abiertamente con sus fans, llegó a su fin el pasado 21 de agosto. Su legado musical, sin embargo, permanecerá vivo a través de temas emblemáticos como "Aún", canciones que marcaron a toda una generación y que siguen resonando en los oídos de miles.

La noticia, confirmada por su novia, la actriz y conductora Ela Corez, a través de un emotivo mensaje en Instagram, ha conmovido a todo el país. Sus palabras, cargadas de dolor y amor, reflejan la profunda conexión que existía entre ambos. "Se fue a cantar al cielo", escribió Ela, una frase que resume la esencia de un artista que dedicó su vida a la música. La imagen de Xava Drago, ahora en un lugar "donde estará tranquilo, sin dolor y con mucha paz", es un consuelo ante la inmensa tristeza que embarga a familiares, amigos y seguidores.

La partida de Xava es particularmente desgarradora considerando la reciente llegada de Sofía, su hija con Ela Corez, quien nació en mayo pasado. La pequeña, sin duda, crecerá rodeada del amor y el recuerdo de su padre, un músico excepcional que dejó una huella imborrable en la música mexicana. La comunidad de Instagram ha respondido con una oleada de apoyo y condolencias a Ela, reconociendo la fortaleza que deberá encontrar en estos momentos tan difíciles. Mensajes de aliento y cariño inundan su perfil, un testimonio del impacto que Xava Drago tuvo en la vida de tantas personas.

Es imposible olvidar la valentía con la que Xava enfrentó su enfermedad, compartiendo abiertamente su lucha y agradeciendo el apoyo incondicional de sus fans, quienes se movilizaron para ayudarlo con donaciones para su tratamiento. Su último comunicado, emitido el 9 de agosto, fue un testimonio de gratitud y amor hacia su familia, su equipo y sus seguidores. En él, reconocía la ineficacia de los tratamientos y expresaba su deseo de disfrutar de sus últimos días rodeado de sus seres queridos. Su transparencia y honestidad durante todo el proceso conmovieron a muchos, convirtiéndolo en un ejemplo de resiliencia y aceptación. La música de Xava Drago seguirá viva, un recordatorio constante de su talento y pasión. Su legado, sin embargo, va más allá de las notas musicales, abarcando la valentía, la honestidad y el amor que demostró hasta el final. Un artista que se entregó por completo a su música y a su público, y que vivirá por siempre en el corazón de quienes lo admiraron y amaron.