
19 de agosto de 2025 a las 01:05
Harfuch: 1615 detenidos por delitos de alto impacto
Sinaloa vive una transformación en materia de seguridad. La estrecha colaboración entre las fuerzas federales y el gobierno estatal está dando frutos palpables en la lucha contra el crimen organizado. No se trata solo de cifras, sino de la construcción de un Sinaloa más seguro, donde las familias puedan vivir tranquilas. Los resultados son contundentes: miles de armas fuera de circulación, toneladas de drogas incautadas, laboratorios clandestinos desmantelados y un número significativo de detenciones. Este esfuerzo conjunto, impulsado por la presidenta Claudia Sheinbaum, está debilitando las estructuras del crimen y recuperando espacios para la paz y el desarrollo.
El decomiso de una tonelada de fentanilo y 1.8 millones de pastillas del mismo opioide es un logro que trasciende las fronteras estatales. Es un golpe directo al narcotráfico que protege la salud de miles de personas, no solo en México, sino también en otros países. Imaginen el daño que estas sustancias podrían haber causado de no haber sido interceptadas. La lucha contra el fentanilo es una prioridad a nivel mundial, y Sinaloa, con el apoyo del gobierno federal, está a la vanguardia en esta batalla.
La entrega de 100 nuevas patrullas a la Policía Estatal es una muestra más del compromiso con la seguridad de los sinaloenses. Estas unidades no solo aumentarán la presencia policial en las calles, especialmente en Culiacán, sino que también fortalecerán la capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia. Es una inversión en la tranquilidad de la población, una herramienta que permitirá a los agentes realizar su trabajo de manera más eficiente y segura. Además, la capacitación constante de los elementos policiales, con el apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional, garantiza la profesionalización de las fuerzas de seguridad y el respeto a los derechos humanos.
Las acciones recientes, como los cateos, las detenciones y el aseguramiento de armas y drogas, demuestran que la estrategia de seguridad está funcionando. La disminución en el promedio diario de homicidios es un indicador alentador, un signo de que se está avanzando en la dirección correcta. Pero la lucha no termina aquí. Se requiere un esfuerzo continuo, una colaboración permanente entre sociedad y gobierno para consolidar los avances y construir un futuro más seguro para todos los sinaloenses.
La seguridad no es solo responsabilidad de las autoridades. Es una tarea compartida que exige la participación activa de la ciudadanía. Denunciar cualquier actividad sospechosa, colaborar con las autoridades y fomentar la cultura de la legalidad son acciones fundamentales para fortalecer la seguridad en nuestras comunidades. Juntos, podemos construir un Sinaloa donde la paz y la justicia prevalezcan.
El compromiso del gobierno federal con Sinaloa es inquebrantable. La inversión en seguridad, la coordinación entre instituciones y la estrategia implementada están dando resultados tangibles. La transformación de Sinaloa es una realidad, un proceso en marcha que requiere el apoyo de todos. Sigamos trabajando juntos para construir un estado más seguro, un estado donde la paz sea el motor del desarrollo y el bienestar de todos sus habitantes.
Fuente: El Heraldo de México