
13 de agosto de 2025 a las 08:20
Rostros del Narco: Extradición a EE.UU.
La sombra de la extradición vuelve a cernirse sobre la relación México-Estados Unidos. En un operativo envuelto en el más absoluto hermetismo, 26 figuras clave del narcotráfico mexicano fueron entregadas a las autoridades estadounidenses este martes 12 de agosto. La noticia, que se ha propagado como la pólvora en medios nacionales e internacionales, reaviva el debate sobre la cooperación bilateral en materia de seguridad y la lucha contra el crimen organizado, y llega en un momento particularmente delicado en las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Las imágenes, escasas y cuidadosamente filtradas, muestran a los extraditados vestidos con uniformes color café, manos esposadas a la espalda, custodiados por un contingente mixto de la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA). Rostros que hasta hace poco sembraban el terror en diversas regiones del país, ahora se ven reducidos a figuras silenciosas bajo el peso de la justicia.
Entre los nombres que han trascendido, destacan dos figuras de particular relevancia: Servando Gómez, alias "La Tuta", exlíder de Los Caballeros Templarios, y Abigael González Valencia, "El Cuini", señalado como el cerebro financiero del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). La extradición de "La Tuta", recordado por sus apariciones en videos propagandísticos y su influencia en el estado de Michoacán, marca un hito en el desmantelamiento de un grupo criminal que durante años mantuvo en jaque a la población civil. Por su parte, la entrega de "El Cuini" representa un duro golpe al CJNG, considerado uno de los cárteles más poderosos y violentos del país, y evidencia la creciente presión internacional sobre sus operaciones financieras.
La discreción que ha rodeado este operativo contrasta con la magnitud del golpe asestado al narcotráfico. ¿A qué se debe este secretismo? Algunos analistas apuntan a la necesidad de evitar posibles reacciones violentas por parte de los cárteles afectados. Otros sugieren que se trata de una estrategia para minimizar la exposición mediática y evitar interferencias en las investigaciones en curso. Sea cual sea la razón, la opacidad alimenta las especulaciones y abre la puerta a interrogantes sobre la transparencia en los procesos de extradición.
La entrega de estos 26 individuos no es un hecho aislado. Se inscribe en una larga y compleja historia de cooperación entre México y Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico, una cooperación marcada por éxitos y fracasos, avances y retrocesos. Si bien la extradición se presenta como una herramienta eficaz para desmantelar las estructuras criminales, también plantea importantes desafíos en términos de soberanía y justicia. ¿Qué garantías existen para que los extraditados reciban un juicio justo en Estados Unidos? ¿Cómo se evita la impunidad y se asegura que los responsables de crímenes atroces rindan cuentas ante la justicia? Estas son preguntas que exigen respuestas claras y contundentes.
El futuro de la lucha contra el narcotráfico depende, en gran medida, de la capacidad de ambos países para fortalecer la cooperación bilateral, basada en el respeto mutuo y la transparencia. La extradición de estos 26 narcotraficantes es un paso importante, pero no la solución definitiva. El verdadero desafío radica en atacar las raíces del problema: la corrupción, la impunidad y la demanda de drogas. Solo así se podrá construir un futuro más seguro y justo para ambas naciones.
Fuente: El Heraldo de México