La lucha contra la delincuencia organizada en México continúa dando frutos. Las cifras presentadas en la Mañanera del 12 de agosto revelan una significativa disminución en los homicidios dolosos, con una caída de una cuarta parte desde el inicio de la administración actual hasta julio pasado. Esto se traduce en 22 vidas salvadas al día, una victoria innegable para la estrategia de seguridad implementada. Si bien aún queda mucho por hacer, esta reducción es un claro indicador de que vamos por el buen camino.

La concentración de la violencia en siete entidades, Guanajuato, Chihuahua, Sinaloa, Baja California, Estado de México, Guerrero y Michoacán, representa un desafío específico que requiere una atención focalizada. Es crucial fortalecer la colaboración entre las autoridades federales y estatales en estas regiones para desarticular las redes criminales que operan en ellas y brindar mayor seguridad a la población. La estrategia debe ir más allá de la reacción y enfocarse en la prevención, atendiendo las causas raíz de la violencia.

La Estrategia Nacional contra la Extorsión, implementada el 6 de julio, ha mostrado resultados prometedores. Las más de 18 mil llamadas recibidas demuestran la confianza ciudadana en esta iniciativa. El hecho de que el 58% de estas llamadas correspondan a extorsiones no consumadas es un testimonio de la efectividad de la orientación brindada por los operadores, quienes han logrado prevenir que miles de ciudadanos caigan víctimas de este delito.

Sin embargo, la cifra de mil 425 denuncias por extorsiones consumadas nos recuerda la necesidad de redoblar esfuerzos. Es fundamental continuar fortaleciendo la capacidad de respuesta de las autoridades para perseguir y castigar a los responsables de estos actos delictivos. La detención de 132 personas por extorsión, principalmente en Tabasco, Estado de México, Michoacán y Guerrero, es un paso en la dirección correcta, pero no podemos bajar la guardia.

La desarticulación de la célula criminal "Los Alfas" en el Valle de Toluca, vinculada a un grupo delictivo originario de Jalisco, es un logro significativo en la lucha contra el crimen organizado. La detención de su líder, Eduardo Alberto "N", alias "El Alfa", y otros miembros de la célula, representa un duro golpe a las estructuras criminales que operan en la región. La liberación de las dos víctimas de secuestro encontradas en el operativo subraya la importancia de estas acciones para la seguridad de la población.

La disminución del 20% en los homicidios dolosos en Sinaloa durante julio, en comparación con junio, es una noticia alentadora. Si bien el acumulado de homicidios en lo que va del año sigue siendo preocupante, este descenso representa un avance importante. La detención de 35 generadores de violencia en la entidad, gracias a la coordinación entre fuerzas federales y estatales, demuestra la eficacia de las estrategias implementadas. Es fundamental mantener estos esfuerzos para consolidar la tendencia a la baja y brindar mayor seguridad a los sinaloenses.

En resumen, la lucha contra la delincuencia en México avanza con paso firme. Las estrategias implementadas están dando resultados, pero es crucial mantener la constancia y fortalecer la coordinación entre las diferentes instancias de gobierno. La participación ciudadana es fundamental en este proceso. Denunciar cualquier acto delictivo es un acto de responsabilidad que contribuye a construir un país más seguro para todos.