Un año. Parece poco tiempo, pero cuando se trata de la transformación de una ciudad, cada día cuenta. Doce meses al frente del Grupo Parlamentario de Morena en el Congreso de la Ciudad de México han sido una intensa travesía, un aprendizaje constante donde los retos, las satisfacciones y la responsabilidad se entrelazan en una dinámica imparable. Desde el primer día, la pluralidad de voces dentro de nuestro movimiento ha sido nuestra mayor fortaleza. Reconozco y agradezco a mis compañeras y compañeros diputados su disposición al diálogo, a la reflexión, elementos cruciales para construir consensos y tomar decisiones acertadas que se traducen en leyes que impactan positivamente en la vida de las y los capitalinos.

Muchos piensan que ser diputada es una tarea sencilla, pero la realidad es otra. El verdadero compromiso social se construye en el territorio, escuchando de viva voz las necesidades de la gente, caminando las calles, visitando casa por casa, llevando acciones concretas a colonias y barrios. Esta labor no se limita a las campañas electorales, es un trabajo diario, una obligación permanente para quienes tenemos el honor de representar al pueblo. Es la forma de honrar la confianza depositada en las urnas.

Liderar la bancada de Morena ha implicado, en ocasiones, pausar mi presencia en Tlalpan, la alcaldía que llevo en el corazón. Sin embargo, gracias al invaluable apoyo de mi equipo, hemos logrado mantener un ritmo constante en las actividades territoriales, desde la entrega de la Cartilla de los Derechos de la Mujer hasta la realización de Jornadas de Servicio Gratuito que brindan atención médica, asesoría legal y gestión de solicitudes ciudadanas.

La aprobación de leyes, Puntos de Acuerdo y minutas requiere un análisis exhaustivo, no solo individual, sino también colectivo. Como Coordinadora, mi responsabilidad va más allá de nuestra bancada, implica dialogar, tender puentes y construir acuerdos con las demás fuerzas políticas representadas en el Congreso. Si bien Morena es mayoría, la colaboración y el respeto a la diversidad de opiniones son fundamentales para el avance de la ciudad. Trabajamos en estrecha colaboración con el Gobierno de la Ciudad, dando cauce a sus propuestas y buscando siempre el bienestar común.

Con orgullo puedo decir que hemos impulsado importantes avances, como la Reforma Judicial, que permitió la participación ciudadana en la elección de jueces y magistrados, fortaleciendo la democracia y la transparencia en nuestro sistema judicial. De igual forma, los nombramientos de las titulares del Instituto de Planeación Democrática y Prospectiva y de la Fiscalía General de Justicia, así como la designación de los fiscales especializados en Delitos Electorales y Combate a la Corrupción, son muestra del compromiso con la justicia y la rendición de cuentas.

Este camino no ha estado exento de sacrificios. El tiempo dedicado a la labor legislativa ha restado horas a la convivencia familiar, pero la convicción de servir a la ciudad me impulsa a seguir adelante con entusiasmo y determinación.

Agradezco profundamente el apoyo incondicional de mis compañeras y compañeros diputados, su entrega y compromiso con la ciudadanía. Un reconocimiento especial a la diputada Brenda Ruiz Aguilar, nuestra Vicecoordinadora, por su invaluable colaboración. Mi gratitud también a la Jefa de Gobierno, Clara Brugada, y a su gabinete por el trabajo conjunto en beneficio de la sociedad capitalina.

En este segundo año de la Tercera Legislatura, seguiremos trabajando con la misma dedicación y escuchando las voces de todas y todos. ¡Juntos consolidaremos el Segundo Piso de la Transformación!