La joven promesa de la música, Mar Lara, quien conquistó el corazón del público en La Academia 2024 alcanzando el quinto lugar, se prepara para deslumbrar esta noche en el icónico Lunario del Auditorio Nacional. Un escenario que ha visto brillar a grandes artistas y que hoy recibe a Mar con los brazos abiertos. En una entrevista exclusiva, la cantante compartió la emoción que la embarga ante este importante paso en su carrera: “Es un sueño hecho realidad, pisar un escenario tan imponente como el Lunario. Y lo mejor es que podré compartirlo con la gente que me ha apoyado desde el inicio, mis fans”.

La expectativa crece ante el misterio que rodea la presentación. Mar promete un espectáculo inolvidable, cargado de sorpresas y momentos impredecibles. "Prepárense para todo", advierte con una sonrisa enigmática. El público podrá disfrutar de versiones únicas de canciones conocidas, pero también se deleitará con temas de su propia autoría, algunos inéditos que verán la luz por primera vez en este escenario. "Quiero mostrarles una faceta de Mar Lara que aún no conocen", confiesa la artista. Además, ha insinuado una sorpresa mayúscula que mantiene en secreto, generando aún más intriga y expectativa entre sus seguidores. "Espero que se aprendan las canciones rápido", añade con picardía, sugiriendo un repertorio rico y diverso.

Su paso por La Academia 2024 fue un momento crucial en su desarrollo artístico y personal. Mar reconoce que la experiencia la transformó profundamente. "Aprendí a confiar en mí misma, a creer en mi potencial. Fue un proceso de crecimiento invaluable, tanto a nivel artístico como personal", reflexiona. La conexión con su interior, con sus emociones y pensamientos, fue un descubrimiento fundamental que marcó un antes y un después en su vida.

Los lazos forjados durante el programa se mantienen fuertes. Mar conserva una relación especial con Lolita Cortés, a quien admira y considera una mentora. También con su director, Héctor Martínez, y con varios maestros, en especial Menny Carrasco, quien la sigue cuidando con cariño paternal. Incluso con Jaime Camil, la conexión perdura, demostrando la huella imborrable que dejó La Academia en su vida.

En un panorama musical dominado por el reggaetón y los corridos tumbados, Mar Lara se mantiene fiel a su estilo propio. Sin embargo, no descarta la posibilidad de explorar nuevos géneros. "Siempre es bueno experimentar, y estoy abierta a probar cosas nuevas. Aún hay mucho por descubrir de mí", asegura. Sus palabras prometen una evolución constante, manteniendo la esencia que la define, pero sin miedo a la innovación.

La transparencia es su principal bandera. En un mundo donde las apariencias y las tendencias a menudo dictan el rumbo, Mar se distingue por su autenticidad. "Escribo lo que siento, busco conectar con los demás a través de mi música", afirma con convicción. Su sensibilidad y creatividad se fusionan en un proceso compositivo único. "Muchas veces me cuesta expresar mis sentimientos con palabras, entonces los escribo en un papel, me siento al piano y dejo que la música fluya", describe la artista.

El Lunario es solo el comienzo. Mar Lara sueña con llevar su música a todos los rincones, no solo de México, sino también a otros países. "Hago música siempre que puedo, cada vez que lo siento. Viene mucha música en camino", promete. Con la determinación que la caracteriza, Mar tiene claro que el único límite es el que ella misma se imponga. "La única persona que debe creer en mí soy yo, y todo es posible si yo lo creo", concluye con una frase que resume su filosofía de vida.