
5 de agosto de 2025 a las 06:40
AMLO Jr. ¿De vacaciones en Japón? ✈️
La supuesta travesía de Andrés Manuel López Beltrán a Japón en un avión militar de lujo ha desatado una ola de especulaciones en redes sociales y algunos medios de comunicación. Sin embargo, una investigación exhaustiva revela que la información difundida es falsa. El supuesto vuelo, que habría tenido lugar el 12 de julio de 2025 a las 19:20 horas desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con destino a Japón, no aparece registrado en ninguna plataforma de seguimiento aéreo confiable.
Utilizando la herramienta #Flightradar24, se ha podido comprobar que ningún vuelo privado despegó del AIFA a la hora indicada. Los registros muestran únicamente despegues de vuelos comerciales en ese rango horario, ninguno de los cuales coincide con las características del supuesto viaje del hijo del presidente. Esto desmonta la narrativa construida en torno a un uso indebido de recursos públicos para fines personales.
Además, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha emitido un comunicado oficial negando categóricamente la existencia de un avión Gulfstream G650 en su flota aérea. Esta declaración oficial desmiente la posibilidad de que una aeronave de este tipo, conocida por su alto costo y lujosas comodidades, haya sido utilizada por algún miembro del gobierno o familiar del presidente.
La propagación de esta información falsa pone de manifiesto la importancia de la verificación de datos en la era digital. En un contexto donde la desinformación se propaga rápidamente a través de las redes sociales, es fundamental contrastar la información con fuentes confiables antes de compartirla. La Sedena, por su parte, ha hecho un llamado a la responsabilidad en el manejo de la información y a evitar la difusión de noticias no verificadas.
Este incidente también nos invita a reflexionar sobre el papel de los medios de comunicación en la difusión de información veraz. Es crucial que los periodistas se comprometan con la rigurosidad periodística y la verificación de datos antes de publicar cualquier información, especialmente aquella que pueda tener implicaciones políticas o sociales. La credibilidad de los medios de comunicación depende de su compromiso con la verdad y la precisión.
Finalmente, es importante destacar la transparencia de la Sedena al desmentir categóricamente la información falsa y al poner a disposición del público la información sobre su flota aérea. Esta actitud de apertura contribuye a fortalecer la confianza de la ciudadanía en las instituciones y promueve un debate público informado y responsable. La lucha contra la desinformación es una tarea conjunta que requiere la participación activa de todos los actores sociales, desde las instituciones gubernamentales hasta los ciudadanos.
Fuente: El Heraldo de México