La imprudencia al volante continúa cobrando víctimas en Nezahualcóyotl. Este domingo, la tranquilidad de la noche se vio interrumpida por dos impactantes accidentes que dejaron un saldo de al menos cinco personas heridas, una de ellas al borde de la amputación. Ambos percances, ocurridos en distintos puntos del municipio, comparten un denominador común: la presunta combinación fatal de alcohol y velocidad.

El primero de estos sucesos tuvo lugar en el cruce de la avenida Chimalhuacán y Paloma Negra, en la colonia Benito Juárez. Un vehículo de transporte público, conocido como "urvan", colisionó violentamente contra un automóvil particular. El impacto, de tal magnitud, proyectó a la urvan contra un poste, dejando atrapada a una mujer en el asiento delantero. Testigos presenciales describieron escenas de angustia y desesperación mientras esperaban la llegada de los servicios de emergencia. Los bomberos, al arribar al lugar, se encontraron con una dificultad inesperada: la falta de herramientas adecuadas para liberar a la víctima de entre los hierros retorcidos. Fue gracias a la intervención del equipo especializado de SUAT Medical que finalmente se logró rescatar a la mujer, quien presentaba una triple fractura en una de sus piernas. Inmediatamente, fue trasladada al Hospital General La Perla para recibir atención médica urgente. Este incidente pone de manifiesto no solo la imprudencia del conductor, sino también la necesidad de que los cuerpos de rescate cuenten con el equipo necesario para responder eficazmente ante este tipo de emergencias.

Horas más tarde, otro accidente conmocionó a los vecinos de la colonia Loma Bonita. En la avenida Floresta, una camioneta, conducida a excesiva velocidad por un hombre presuntamente bajo los efectos del alcohol, perdió el control y se empotró en un local de comida. Las consecuencias fueron devastadoras para uno de los trabajadores del establecimiento, quien quedó atrapado bajo el vehículo. El impacto le provocó graves lesiones en ambas piernas, una de las cuales estuvo a punto de ser amputada. Nuevamente, el equipo de SUAT Medical fue crucial para liberar al hombre y trasladarlo al ISSSTE de Zaragoza. El conductor de la camioneta también resultó herido, con traumatismo craneoencefálico, y fue llevado al Hospital General de La Perla.

Estos dos accidentes, ocurridos en una sola noche, reavivan la preocupación por la seguridad vial en Nezahualcóyotl. Vecinos y autoridades coinciden en que la falta de operativos de control de alcoholemia, especialmente durante los fines de semana, contribuye a la alta incidencia de este tipo de tragedias. Se exige una mayor presencia policial y la implementación de medidas más estrictas para sancionar a quienes conducen bajo los efectos del alcohol. La pregunta que queda en el aire es ¿cuántas víctimas más serán necesarias para que se tomen medidas contundentes? La vida de los ciudadanos no puede seguir dependiendo de la suerte o la responsabilidad individual. Es necesario un compromiso real por parte de las autoridades para garantizar la seguridad en las calles de Nezahualcóyotl. La prevención y la concientización son claves para evitar que estas escenas de dolor se repitan.