
2 de agosto de 2025 a las 00:20
Vallarta a García Luna: "Tiempo para reflexionar"
Tras casi dos décadas de encierro, Israel Vallarta Cisneros respira por fin el aire de la libertad. Veinte años que, según sus propias palabras, no lograron quebrar su espíritu ni aprisionar su mente. Un hombre que, a pesar de la sombra de la acusación por el secuestro de Hugo Alberto Wallace Miranda, siempre se declaró inocente y luchó incansablemente por demostrar la verdad. Su liberación, un hito en un caso plagado de controversias, abre un nuevo capítulo en su vida y plantea interrogantes sobre el sistema judicial mexicano.
Vallarta Cisneros recuerda con serenidad la liberación de su expareja, Florence Cassez, no como un golpe emocional, sino como un triunfo merecido, una puerta a la esperanza. "Una mujer que amé, hoy la respeto", declara, palabras que reflejan la distancia del tiempo y la madurez adquirida en el crisol de la adversidad. Él, curtido en las prácticas del sistema mexicano, veía con dolor la ingenuidad de Cassez, su fe ciega en una justicia que la traicionó. Un contraste que subraya las profundas diferencias en sus experiencias durante el proceso.
La pérdida de sus padres, en 2011 y 2017, fueron los momentos más oscuros, los instantes en los que la idea de rendirse rozó su mente. Sin embargo, la fuerza interior, alimentada por la convicción de su inocencia, lo mantuvo a flote. Ahora, en libertad, Vallarta Cisneros busca respuestas y un diálogo abierto. Desea hablar con el periodista Carlos Loret de Mola, dejando entrever la existencia de asuntos inconclusos, de historias aún por contar. Al expresidente Felipe Calderón le envía bendiciones, un gesto que contrasta con la firmeza de sus palabras hacia Genaro García Luna, a quien le desea resignación y tiempo para reflexionar sobre sus actos. “A cada acción hay una reacción”, sentencia, una frase que resume la ley de causa y efecto que rige la vida.
Vallarta Cisneros señala que García Luna no actuó solo. Insinúa la existencia de una red, de cómplices que deben rendir cuentas ante la justicia. Un llamado a las autoridades mexicanas a profundizar en la investigación y a no dejar cabos sueltos. Además, expresa su deseo de dialogar con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, una solicitud que pone de manifiesto su intención de colaborar en el esclarecimiento de los hechos y en la búsqueda de la verdad.
Por otro lado, Mary Sainz, esposa de Vallarta Cisneros, describe el momento en que recibió la noticia de la liberación como un shock, una mezcla de incredulidad y alegría. Un "balde de agua fría" que la dejó sin aliento. La confirmación, a través de los abogados y la Defensoría Pública, transformó la incertidumbre en júbilo, marcando el inicio de una nueva etapa en sus vidas.
La historia de Israel Vallarta Cisneros es un recordatorio de la fragilidad del sistema judicial y de la importancia de la presunción de inocencia. Un caso que ha capturado la atención del público durante dos décadas y que, con su liberación, abre un nuevo capítulo en la búsqueda de la justicia y la verdad. ¿Quiénes son los verdaderos responsables? ¿Qué papel jugaron los medios de comunicación en este caso? ¿Qué le depara el futuro a Israel Vallarta Cisneros? Preguntas que aún resuenan en el aire y que exigen respuestas.
Fuente: El Heraldo de México