
1 de agosto de 2025 a las 19:55
Revolución Energética en la Extracción de Agua
La creciente preocupación por la gestión sostenible del agua en México ha cobrado un nuevo impulso con el anuncio del diputado federal Alfonso Ramírez Cuéllar sobre la realización de un taller en la Ciudad de México enfocado en el financiamiento mixto para la modernización de sistemas de extracción de agua. Este anuncio, realizado en el marco del Foro Nacional para la Gestión Eficiente del Agua y Energía, celebrado en el icónico Hospicio Cabañas de Guadalajara, no se limita a una simple propuesta de financiamiento, sino que se enmarca dentro de un ambicioso decálogo de acciones para alcanzar la justicia hídrica en el país.
El decálogo, presentado por el legislador, aborda la problemática desde diferentes ángulos, proponiendo medidas concretas para frenar la sobreexplotación de acuíferos, un problema acuciante que amenaza la sostenibilidad del campo mexicano. Además, plantea una necesaria transformación de los esquemas de subsidios eléctricos agrícolas, buscando no solo una mayor eficiencia energética, sino también una transición hacia energías limpias que contribuyan a la mitigación del cambio climático. El fortalecimiento de la gobernanza hídrica es otro pilar fundamental de este decálogo, buscando una gestión más transparente y participativa que involucre a todos los actores implicados.
Ramírez Cuéllar enfatizó la importancia de estas acciones para garantizar el derecho humano al agua, un derecho fundamental que debe ser protegido y garantizado para todos los mexicanos. El ordenamiento del uso del subsuelo, estrechamente ligado a la gestión del agua subterránea, es otro elemento clave para asegurar la sostenibilidad del campo y el futuro del sector agropecuario. La promoción del uso de energías limpias en el campo no solo contribuye a la preservación del medio ambiente, sino que también puede representar una oportunidad para mejorar la productividad y la rentabilidad de las explotaciones agrícolas.
El Foro Nacional, un espacio de diálogo y colaboración, reunió a un diverso grupo de actores, desde representantes del Gobierno Federal y autoridades estatales, hasta académicos, organizaciones de la sociedad civil, productores y funcionarios de organismos internacionales como el Banco Mundial. La presencia de figuras como el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus; el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri; y el secretario de Agricultura, Julio Berdegué Sacristán, subraya la relevancia del tema y el compromiso de las autoridades con la búsqueda de soluciones.
Las mesas de trabajo, un componente central del foro, se centraron en temas cruciales como la eficiencia energética, la conservación de acuíferos y la productividad agrícola. Se hizo especial hincapié en la necesidad de restaurar los suelos, no solo para mejorar la productividad, sino también para facilitar la recarga hídrica y reducir el consumo energético en los sistemas de bombeo, un círculo virtuoso que beneficia tanto al medio ambiente como a la economía.
El compromiso de Ramírez Cuéllar va más allá de la propuesta del taller y el decálogo de acciones. El legislador propuso la creación de una mesa intergubernamental que reúna a los gobiernos de Baja California, Chihuahua, Guanajuato, Jalisco, Querétaro, Sonora y Zacatecas, estados con importantes desafíos en materia de gestión del agua. Esta mesa, concebida como un espacio de coordinación y colaboración, buscará abordar de manera conjunta los retos relacionados con el uso sustentable del agua subterránea, compartiendo experiencias y buscando soluciones innovadoras.
Finalmente, Ramírez Cuéllar concluyó con una contundente afirmación: "Sin justicia hídrica no hay justicia social, y sin orden en el uso del agua subterránea, no hay futuro para el campo mexicano". Una frase que resume la urgencia y la importancia de actuar con decisión y responsabilidad para garantizar un futuro sostenible para el campo y para todos los mexicanos. El taller sobre financiamiento mixto, el decálogo de acciones y la propuesta de la mesa intergubernamental son pasos concretos en esa dirección, abriendo un camino de esperanza hacia una gestión más eficiente y justa del agua en México.
Fuente: El Heraldo de México