
1 de agosto de 2025 a las 20:05
Adiós a una leyenda Tex-Mex
El acordeón enmudece, el corazón de Texas llora. La leyenda del Tex-Mex, Flaco Jiménez, nos ha dejado a la edad de 86 años, dejando un vacío inmenso en el panorama musical. La noticia, confirmada por sus hijos a través de un conmovedor mensaje en redes sociales, ha resonado como un trueno en la comunidad texana y en el mundo entero. Un silencio respetuoso, roto solo por el eco de sus inolvidables melodías, se extiende entre los amantes de la música tejana.
Flaco Jiménez, más que un músico, fue un embajador de la cultura Tex-Mex, un puente entre dos mundos que supo fusionar con maestría en cada nota que emanaba de su acordeón. Su música trascendió fronteras, generaciones e idiomas, llevando la alegría y la melancolía del sur de Texas a todos los rincones del planeta. Desde los pequeños salones de baile hasta los grandes escenarios internacionales, su talento innato y su carisma inigualable conquistaron a millones de personas.
Nacido en San Antonio, Texas, en el seno de una familia de músicos, el Flaco respiró música desde la cuna. Su padre, Santiago Jiménez, fue un pionero del conjunto tejano, y le transmitió la pasión por el acordeón y la tradición musical de su tierra. Desde muy joven, Flaco demostró una habilidad excepcional para el instrumento, forjando un estilo propio que lo convertiría en un icono. Su virtuosismo con el acordeón, su capacidad para improvisar y su profunda conexión con la música tejana lo llevaron a colaborar con artistas de renombre internacional, como Ry Cooder, Bob Dylan, Los Lobos y The Rolling Stones, entre otros.
Su legado musical es invaluable. Sus grabaciones, repletas de polkas, rancheras, cumbias y boleros, son un testimonio de su genio creativo y de la riqueza cultural del Tex-Mex. Canciones como "Ay Te Dejo en San Antonio", "El Naranjal" y "Viva Seguin" forman parte del cancionero popular y se han convertido en himnos para la comunidad texana.
Más allá de los premios y reconocimientos, que fueron muchos, incluyendo un Grammy a la Excelencia Musical, el verdadero legado de Flaco Jiménez reside en la huella imborrable que dejó en la música y en los corazones de quienes tuvieron el privilegio de escucharlo. Su música, llena de sentimiento y autenticidad, seguirá inspirando a generaciones de músicos y seguirá sonando en las fiestas, en los bailes y en los hogares de Texas y del mundo entero.
La familia Jiménez ha pedido respeto y privacidad en estos momentos de dolor. Compartimos su pesar y nos unimos al homenaje a este gigante de la música Tex-Mex. Flaco, tu música vivirá por siempre. Descansa en paz.
Mientras esperamos más detalles sobre los servicios funerarios, recordamos la importancia de celebrar la vida y la obra de este excepcional artista. Escuchemos su música, compartamos sus canciones y mantengamos viva la llama de la tradición Tex-Mex que él tanto amó y defendió. Su acordeón podrá haber enmudecido, pero su música resonará por siempre en nuestros corazones.
Este no es un adiós, sino un hasta luego. Hasta que volvamos a encontrarnos en la música, Flaco.
Fuente: El Heraldo de México