La reaparición de Manuel Masalva en "Ventaneando" ha conmovido a México entero. Tras una silenciosa batalla contra una agresiva infección bacteriana que lo mantuvo al borde de la muerte, el actor, conocido por su participación en producciones como "La Rosa de Guadalupe" y "Narcos: México", ha compartido su estremecedor testimonio. Su relato, cargado de emotividad y detalles sobre la pesadilla vivida, nos recuerda la fragilidad de la vida y la importancia de la perseverancia.

El calvario comenzó durante sus vacaciones. Tras una estancia en Filipinas, país donde, según informes médicos, existen cepas bacterianas de alta virulencia, Masalva comenzó a experimentar síntomas preocupantes. Lo que inicialmente parecía una dolencia pasajera, se transformó rápidamente en una grave amenaza para su vida. Al llegar a Dubái, su segunda parada en el itinerario vacacional, la situación se agravó drásticamente, obligando a su ingreso de emergencia en un hospital local.

La severidad del cuadro clínico obligó a los médicos a inducirlo a un coma, una medida extrema pero necesaria para estabilizarlo y evitar daños irreversibles. Mientras Masalva luchaba por su vida, inconsciente del mundo exterior, la noticia de su estado crítico se propagaba como la pólvora gracias a la alerta lanzada por su amigo y colega Mario Morán. La descripción de Morán sobre la "extremadamente agresiva" infección que padecía Masalva generó una ola de preocupación y solidaridad en el mundo del espectáculo y entre sus seguidores.

Ante los elevados costos hospitalarios en Dubái y la previsión de un largo proceso de recuperación, la familia de Masalva, con el apoyo de amigos y colegas, inició una campaña de recaudación de fondos a través de la plataforma GoFundMe. La respuesta fue abrumadora. Fans, amigos y compañeros de profesión se volcaron en apoyo al actor, demostrando la profunda huella que ha dejado en la industria y en el corazón del público.

Durante su prolongada estancia en coma inducido, que se extendió por más de un mes, amigos cercanos como Emmanuel Palomares describieron jornadas angustiantes de incertidumbre y lenta evolución. Su mánager, Jaime Jaramillo Espinosa, se aferraba a la esperanza, confiando en la juventud y fortaleza de Masalva para superar la crisis. Finalmente, tras semanas de tensión, la actriz Nova Coronel trajo la noticia que todos esperaban: Manuel había despertado del coma y lograba comunicarse a través de mensajes de voz. Un pequeño pero significativo paso hacia la recuperación.

Después de 105 días de hospitalización, 81 de ellos sin ver la luz del día, Masalva reapareció en redes sociales con un emotivo mensaje: "Estoy sanando. Dios me ha dado una nueva vida". En su publicación, el actor no solo celebraba su despertar físico, sino también un renacimiento espiritual, influenciado por la cultura y la espiritualidad del lugar donde enfrentó la prueba más dura de su vida.

La historia de Manuel Masalva es un testimonio de resiliencia, un recordatorio de que incluso en las situaciones más adversas, la esperanza y la solidaridad pueden marcar la diferencia. Su regreso a la vida pública no solo es una victoria personal, sino también una inspiración para todos aquellos que enfrentan sus propias batallas. Su gratitud hacia su familia, los médicos y quienes lo apoyaron durante este difícil proceso, refleja la humildad y la fortaleza de un hombre que ha renacido de las cenizas. Ahora, comienza un nuevo capítulo en su vida, un capítulo lleno de esperanza y gratitud. El camino hacia la recuperación total aún es largo, pero con el apoyo incondicional que ha recibido, Manuel Masalva está listo para enfrentarlo con la misma valentía y determinación que lo han caracterizado siempre.