
Inicio > Noticias > Accidentes
31 de julio de 2025 a las 08:45
Gallo de pelea mata a hombre con navaja en el estómago
La tragedia ha vuelto a teñir de sangre las arenas de las peleas de gallos en Bali. Un hombre de 50 años, Nengah Sudana, perdió la vida en un incidente tan absurdo como brutal, víctima de un gallo armado con una espuela de metal. La escena, ocurrida en una plaza de Denpasar el pasado domingo, nos recuerda la peligrosa línea que separa la tradición de la tragedia. Imaginen a Sudana, asistiendo como espectador a un evento que, para muchos balineses, forma parte de su cultura, de sus rituales religiosos. De repente, el caos. Un gallo se suelta antes de tiempo, la confusión se apodera del lugar, y en un instante, la afilada espuela se clava en el estómago de Sudana. Un giro cruel del destino que deja una familia destrozada y una comunidad conmocionada.
La rápida intervención de los presentes no fue suficiente. Sudana fue trasladado al Hospital Puri Raharja, pero la gravedad de la herida selló su destino antes de su llegada. Esa misma noche, su cuerpo regresó a su pueblo natal, Angantelu, en Karangasem, dejando un vacío imposible de llenar. La policía, tras descartar cualquier intencionalidad criminal, ha clasificado el suceso como un accidente. "La víctima no pudo evitar el gallo atacante y fue golpeado", declaró el portavoz policial Ketut Sukadi, una frase que resume la brutal simplicidad de la tragedia.
Este incidente reabre el debate sobre las peleas de gallos en Bali. Una práctica arraigada en la tradición hindú, pero que también se ve empañada por las apuestas ilegales y la violencia. Mientras en muchas partes de Indonesia estas peleas están prohibidas, en Bali persisten, generando una compleja controversia entre la cultura, la ley y la ética. No se trata de un caso aislado. Hace apenas unas semanas, otro hombre perdió la vida en circunstancias similares en Bangli, un hecho que aún se encuentra bajo investigación. Estas sombras de violencia proyectan una imagen inquietante sobre una tradición que muchos defienden como parte integral de su identidad.
El vicegobernador de Bali, Nyoman Giri Prasta, ha expresado su preocupación por la escalada de violencia en estos eventos, señalando al consumo de alcohol como un factor agravante que desata "emociones incontrolables". En junio, los legisladores provinciales intentaron regular las peleas de gallos vinculadas a las tradiciones, una iniciativa rechazada por el gobernador Wayan Koster, quien, sin embargo, reiteró la prohibición de las apuestas. Un delicado equilibrio entre el respeto a la cultura y la necesidad de proteger a los ciudadanos.
La tragedia de Sudana no es única. Resuenan ecos de incidentes similares en otros rincones del mundo. En India, en 2020, un hombre falleció tras ser acuchillado por un gallo. En Filipinas, un policía perdió la vida durante una redada en un gallinero ilegal, víctima de una herida en la arteria femoral causada por la espuela de un gallo de pelea. Historias que nos recuerdan la fragilidad de la vida y la imprevisible naturaleza de la violencia, incluso en contextos que parecen alejados del peligro. ¿Hasta cuándo se permitirá que la tradición se tiña de sangre? ¿Es posible encontrar un equilibrio entre el respeto a la cultura y la protección de la vida humana? Estas son las preguntas que resuenan tras la tragedia de Nengah Sudana, un hombre que acudió a presenciar una tradición y encontró la muerte en las espuelas de un gallo.
Fuente: El Heraldo de México