
30 de julio de 2025 a las 19:05
¡Cerveza en las calles de Monterrey para el Mundial 2026!
Monterrey se prepara para el Mundial 2026 y la posible implementación de "zonas de tolerancia" para el consumo de alcohol en la vía pública genera debate. El alcalde Adrián de la Garza ha aclarado que la medida, aún en análisis, se limitaría a corredores específicos cercanos a los eventos mundialistas y estaría sujeta a la coordinación con otros municipios del área metropolitana. Lejos de una permisividad generalizada, se busca una solución pragmática para aquellos visitantes que, al salir de los estadios con bebidas en mano, se dirijan a sus alojamientos. La prioridad, insiste De la Garza, sigue siendo la seguridad vial y los operativos antialcohol continuarán vigilando las calles de Monterrey. Esta propuesta, lejos de ser una invitación al desenfreno, se plantea como una estrategia de control y orden, buscando un equilibrio entre la celebración y la responsabilidad. Se trata de una medida excepcional, acotada a zonas y horarios específicos, y bajo estricta supervisión. ¿Será suficiente para contener los excesos? El debate está abierto.
Mientras tanto, en Guadalupe, el alcalde Héctor García enfoca sus esfuerzos en la logística y la atención al visitante. Pavimentación de calles, adquisición de equipo de seguridad y, sobre todo, la capacitación de un ejército de voluntarios son las claves de su estrategia. Más de dos mil jóvenes, entrenados en atención al turista e incluso en idiomas, serán los encargados de guiar y orientar a quienes visiten el municipio durante la justa mundialista. Desde festivales en zonas verdes como el Río La Silla y el Parque Las Pastoras, hasta la fluida circulación vial en los alrededores del estadio, los voluntarios jugarán un papel crucial en la experiencia del visitante. La convocatoria ya está abierta, y la calidez y amabilidad son los principales requisitos. Una oportunidad única para los jóvenes de Guadalupe de participar activamente en un evento de talla mundial, y al mismo tiempo, una apuesta por la hospitalidad y la eficiencia en la atención al turista. El objetivo es claro: que la experiencia del Mundial 2026 sea memorable para todos, desde el aficionado que llega del otro lado del mundo hasta el voluntario que lo recibe con los brazos abiertos. La preparación ya está en marcha, y la expectativa crece día a día. ¿Estará Nuevo León a la altura del desafío? El tiempo lo dirá.
Más allá de la polémica sobre el alcohol, la conversación de fondo es cómo las ciudades se preparan para recibir a una avalancha de visitantes. ¿Se trata solo de infraestructura y logística, o también de una transformación cultural que permita a los ciudadanos ser anfitriones de un evento global? Desde la pavimentación de una calle hasta la sonrisa de un voluntario, cada detalle cuenta en la construcción de una experiencia memorable. El Mundial 2026 no es solo un evento deportivo, es una oportunidad para mostrar al mundo lo mejor de Nuevo León, su gente, su cultura y su capacidad de organización. Y en esa tarea, la participación ciudadana es fundamental. El reto es grande, pero la ilusión es aún mayor. El camino hacia el 2026 apenas comienza, y promete estar lleno de desafíos y oportunidades.
Fuente: El Heraldo de México