La tensión se palpa en el ambiente. Un silencio incómodo, roto solo por el crujir de la madera, precede al estruendo. Dalilah Polanco, la reconocida actriz de "La Familia P. Luche", protagoniza un momento que ha incendiado las redes sociales: la silla de Abelito, el querido influencer, yace en el suelo, partida en dos. Un accidente, una broma pesada, un acto intencionado… las especulaciones corren como la pólvora en el universo digital.

El video del incidente se ha vuelto viral. En él se ve a Dalilah en la cocina, rodeada de otros participantes. Con la naturalidad que la caracteriza, pregunta "¿quién trajo esto?", refiriéndose a la silla que la producción acababa de entregar a Abelito. Sin preámbulos, se sube a ella. El resultado es catastrófico: la silla cede bajo su peso. La sorpresa en el rostro de Dalilah es evidente, al igual que la de sus compañeros. “Estoy perfectamente bien”, asegura, tratando de calmar los ánimos.

Pero el daño ya está hecho. En redes sociales, la controversia está servida. Mientras algunos usuarios la defienden, argumentando que se trató de un simple accidente, otros la acusan de irrespetuosa y de haber actuado con premeditación. "¿Lo hizo a propósito?", se preguntan algunos, incrédulos. "Todavía se enoja y le echa la culpa al carpintero", ironizan otros. Las críticas no se han hecho esperar, y la palabra "funa" resuena con fuerza en Twitter, ahora X.

En contraste, un sector del público se ha volcado en apoyo de Dalilah. “Técnicamente le salvó la vida a Abelito”, argumentan, sugiriendo que la silla podría haber colapsado en un momento aún más inoportuno. “Fue un accidente, no la funen”, piden, apelando a la comprensión. “El odio a Dalilah es demasiado forzado”, señalan, insinuando una campaña orquestada en su contra.

En medio de la tormenta, la figura de Abelito emerge con una serenidad admirable. Lejos de enfadarse o reprochar a Dalilah, el joven influencer se toma el incidente con humor. Con una humildad conmovedora, se dirige a "La Jefa" para solicitar la reparación de su preciada silla. “Disculpe, jefa, lo que pasa es que se aflojaron los tornillitos, nomás es apretarlos, perdón”, explica con una dulzura que ha enternecido a la audiencia.

La actitud de Abelito ha generado una ola de simpatía en redes sociales. Muchos lo comparan con Wendy Guevara, la ganadora de la primera edición de "La Casa de los Famosos México", destacando su carisma y su capacidad para conectar con el público. Sin embargo, también hay quienes ven en su comportamiento una estrategia de "manipulación" para ganarse el favor de la audiencia. "¿Pide perdón y no fue su culpa?", cuestionan algunos, sospechando de sus intenciones.

El incidente de la silla rota ha dejado al descubierto las tensiones y las contradicciones que se viven dentro de "La Casa de los Famosos México". Un reality show que, una vez más, demuestra su capacidad para generar polémica y mantener a la audiencia en vilo. ¿Será este el inicio de una rivalidad entre Dalilah y Abelito? ¿O lograrán superar este episodio y mantener una convivencia cordial? Solo el tiempo lo dirá. Lo que es seguro es que la silla rota se ha convertido en un símbolo de la fragilidad de las relaciones humanas, incluso en el contexto de un juego.