
28 de julio de 2025 a las 09:10
¡Pollo Gallardo al descubierto!
La figura de Ricardo Gallardo, gobernador de San Luis Potosí, se ha convertido en un tema recurrente de controversia, generando una ola de reacciones encontradas dentro y fuera de la 4T. Su pasado, marcado por acusaciones de delincuencia organizada y lavado de dinero, sigue siendo una sombra que lo persigue, a pesar de sus intentos por presentarse como víctima de una injusticia. La sospecha sobre el desvío de 200 millones de pesos del municipio de Soledad de Graciano continúa latente en la memoria colectiva, alimentando la desconfianza de muchos. Incluso dentro de los círculos cercanos a AMLO y Sheinbaum, su nombre se pronuncia con cautela, evidenciando la incomodidad que genera su presencia.
La ambigüedad es una constante en la trayectoria de Gallardo, una característica que se refleja en sus acciones y declaraciones. El reciente episodio en la inauguración del 79 Congreso y Campeonato Nacional Charro, donde sus palabras fueron interpretadas como una apología a la violencia, es un ejemplo claro de su tendencia a la polémica. La frase "yo voy con la pala para enterrarle al cadáver, esos son los amigos chingones", resonó con fuerza en la opinión pública, generando indignación y rechazo. Este incidente no es un hecho aislado, sino que se suma a una serie de controversias que han marcado su gestión.
Su círculo cercano, compuesto por figuras de dudosa reputación, refuerza la percepción de un gobierno opaco y cuestionable. Individuos que difícilmente pasarían una evaluación de control y confianza, levantan sospechas sobre la integridad y transparencia de la administración estatal. La historia del fantasma de la Emperatriz Carlota, que circuló en redes sociales, se percibe como una maniobra de distracción, un intento por desviar la atención del desastre administrativo que, según muchos, caracteriza su gobierno.
La incongruencia entre su supuesto ideario de izquierda y sus propuestas, como la pena de muerte para asesinos y la castración para violadores, confunde y genera aún más interrogantes sobre sus verdaderas convicciones. En San Luis Potosí, la ciudadanía espera con ansias el fin de su mandato, mientras que en Palacio Nacional, su figura se ha convertido en un problema incómodo para la 4T.
La ironía radica en que, a pesar de la polémica que rodea a Gallardo, la oposición parece no tener posibilidades de ganar en las próximas elecciones, según la encuesta realizada por QM Estudios de Opinión en alianza con el Heraldo Media Group. La suma de la intención de voto del PAN y el PRI apenas alcanza 22 puntos, lo que deja a San Luis Potosí en una situación paradójica: un gobernador impopular, pero una oposición incapaz de capitalizar el descontento.
En este escenario, surge la pregunta sobre quién será el candidato de la alianza Juntos Haremos Historia en SLP. Rosa Icela Rodríguez ha negado en repetidas ocasiones tener aspiraciones a la gubernatura, pero el nombre de su hermana, Rita Oralia Rodríguez Velázquez, comienza a sonar como una posible alternativa. Lo crucial, es evitar a toda costa la llegada de la senadora Ruth González Silva, esposa de Gallardo, cuya asociación con el gobernador la convierte en una figura indeseable para Morena. La instrucción de la Presidenta es clara: no se permitirá la llegada de un recomendado del "Pollo" Gallardo, una directriz que Luisa Alcalde se encargará de cumplir al pie de la letra.
Mientras tanto, el debate sobre la reforma electoral continúa, aunque la iniciativa aún se desconoce. El reto será encontrar una propuesta que satisfaga a todas las fuerzas políticas, una tarea que se antoja compleja y llena de obstáculos. ¿Más plurinominales o eliminarlos? Esa es la pregunta que aún no tiene respuesta.
Fuente: El Heraldo de México