Cuarenta años. Cuatro décadas. Parece mentira que haya pasado tanto tiempo desde que Marty McFly y el Doc Brown nos llevaran por primera vez en su DeLorean a un viaje a través del tiempo. "Volver al Futuro", una película que trascendió la pantalla grande para convertirse en un fenómeno cultural, celebra su aniversario en este 2025, un año que, irónicamente, la propia película imaginó de una forma muy diferente. Y para festejar este hito, México ha tenido el privilegio de recibir a Claudia Wells, la Jennifer Parker original, en una visita que ha dejado a la actriz enamorada de nuestro país.

La emoción de Wells es palpable. "¡Ya soy una chica mexicana!", exclama con una sonrisa que contagia su entusiasmo. Para ella, estos 40 años han pasado volando, una paradoja que, considerando la temática de la película, resulta aún más curiosa. "Es impresionante cómo el tiempo vuela", comenta entre risas, reconociendo la ironía. "Para mí, diez años pasan rapidísimo. He vivido una gran vida en estos 40 años, pero es como si no hubiera pasado el tiempo."

Su llegada a México no es casualidad. Forma parte de una gira mundial de celebración del aniversario de "Volver al Futuro", una película que le abrió las puertas a un mundo de oportunidades y experiencias. Wells comparte con generosidad anécdotas del rodaje, como la singularidad de haber conseguido el papel de Jennifer Parker con tan solo una audición, entre cientos de aspirantes. Un hecho que ella atribuye, en parte, a una curiosa coincidencia: su hermana se llama Jennifer, un nombre que su madre usaba cariñosamente para referirse a ella mucho antes de la película.

"Estoy muy agradecida de haber estado en esa película porque ahora tengo la oportunidad de tener este tipo de experiencias", reflexiona Wells, visiblemente conmovida por el cariño del público. "Es imposible imaginar que cada año hay más fans de la película. Y voy a tener el año 2026 para seguir viajando. Es extraordinario."

Más allá de la nostalgia y los recuerdos, Wells habla con pasión de su oficio. Para ella, actuar es una forma de trascender, de convertirse en alguien más. "Me encanta actuar, todo se va cuando la cámara empieza a filmar y tengo la oportunidad de ser otra persona", confiesa. "Así que para mí no hay como tal un momento en particular (favorito en la película), todos los momentos que pasé fueron increíbles. Actuar, para mí, me llena de todas las formas."

Y México, sin duda, también ha llenado su alma. Desde la comida, que describe con deleite, hasta la belleza de Xochimilco, donde tuvo el honor de navegar en una trajinera con su nombre, Wells se ha empapado de la cultura mexicana. Las catedrales, en particular, la han dejado maravillada: "No hay nada como eso en el mundo", afirma con admiración. Su interacción con los fans mexicanos ha sido igualmente gratificante, destacando su amabilidad y entusiasmo.

La visita de Claudia Wells a México es más que una simple celebración de un aniversario. Es un recordatorio del poder del cine para conectar generaciones, para trascender fronteras y para crear lazos perdurables. Es un testimonio de la pasión y la dedicación de los actores que dan vida a las historias que nos conmueven y nos inspiran. Y es, sobre todo, una invitación a revisitar "Volver al Futuro", una película que, 40 años después, sigue resonando con la misma fuerza y magia que en 1985. Una película que nos recuerda que el futuro, al igual que el pasado, está en constante construcción.