
23 de julio de 2025 a las 19:15
Lizette, la chiapaneca que conquistó la UNAM
Desde las exuberantes selvas de Ocosingo, Chiapas, surge una historia de perseverancia y talento que inspira a todo México. Lizette Jacqueline Cruz Gómez, una joven egresada del Colegio de Bachilleres plantel 16, ha alcanzado las estrellas, no literalmente, aunque pronto lo hará, pues ha conseguido una calificación perfecta en el examen de ingreso a la prestigiosa Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para la carrera de Ingeniería Aeroespacial. Un logro que no solo la catapulta a la élite académica del país, sino que también la convierte en un ejemplo a seguir para jóvenes de todo el estado y más allá.
Imaginen la escena: una joven con la mirada puesta en el cielo, no solo soñando con las estrellas, sino preparándose para alcanzarlas. Lizette, en sus ratos libres, alternaba las ecuaciones con las melodías del piano, demostrando una versatilidad que solo se encuentra en las mentes más brillantes. Un curso de robótica durante la preparatoria fue la chispa que encendió su pasión por la ingeniería, un giro inesperado en su camino, pues su vocación inicial era la docencia. Sin embargo, con una honestidad admirable, Lizette reconoció que la enseñanza no era su fuerte. "No tengo esa facilidad de expresarme y de enseñarle a los demás", confesó. Fue entonces cuando, con la curiosidad y la determinación que la caracterizan, se adentró en el fascinante mundo de la ingeniería aeroespacial, un campo donde las matemáticas y la física, sus grandes pasiones, se entrelazan para dar vida a los sueños más ambiciosos.
Hace apenas tres años, el internet llegó a su vida, abriendo un universo de posibilidades. Con la carrera elegida, Lizette se sumergió en cursos online durante ocho meses, complementando su formación con tutoriales de YouTube. Un ejemplo de autodidactismo y perseverancia en la era digital. Horas de estudio, dedicación incansable y una sed insaciable de conocimiento la llevaron a formar parte del selecto grupo de 19,554 jóvenes aceptados en la UNAM, la máxima casa de estudios del país.
“Por la complejidad me gusta seguir aprendiendo”, afirma Lizette, revelando una mentalidad excepcional. Para ella, el desafío es el motor que impulsa su aprendizaje. “Cuando es algo cotidiano, que yo siento que es un poquito sencillo, pues pierde el interés completamente”, continúa, demostrando una inclinación natural hacia los retos intelectuales. "Sí, es un poco como masoquismo, pero sí me gusta estar martirizándome con los números", confiesa con una sonrisa, dejando entrever la pasión que la impulsa.
La noticia de su logro resonó con fuerza en la plataforma Admisión UNAM, donde recibió una felicitación especial. La alegría se desbordó en su familia y en el Colegio de Bachilleres de Chiapas plantel 16 de Ocosingo. Jhonatan Fonseca Fierro, director del plantel, expresó con orgullo el sentir de toda la comunidad educativa: "Nos llena de orgullo, estamos muy orgullosos del gran resultado que Lizeth ha logrado. Este es mérito de la alumna, prácticamente de la alumna y de todo el apoyo que tienen sus padres”.
Su trayectoria no se limita a la excelencia académica. Lizette ha conquistado diversos torneos de robótica y ha clasificado a la Olimpiada Estatal de Física. Un talento innato que, combinado con su esfuerzo y dedicación, ha sido reconocido por el Gobierno de Chiapas, quien le ha otorgado una beca que cubre alimentación, transporte y hospedaje durante toda su carrera universitaria. Un apoyo invaluable que le permitirá concentrarse en sus estudios y alcanzar su máximo potencial.
La historia de Lizette es un faro de esperanza para la juventud chiapaneca y un testimonio del poder transformador de la educación. Una joven que, desde las montañas de Ocosingo, ha demostrado que con perseverancia, dedicación y pasión, los sueños, incluso los que parecen más lejanos, están al alcance de la mano.
Fuente: El Heraldo de México