
22 de julio de 2025 a las 20:00
Intercambia armas por paz
La paz, un anhelo universal, se construye día a día con acciones concretas y la campaña "Sí al Desarme, Sí a la Paz" es un ejemplo palpable de ello. Recorriendo el país, de estado en estado, esta iniciativa ha logrado un impacto significativo al intercambiar miles de armas de fuego por dinero en efectivo, ofreciendo una alternativa a quienes desean alejarse de la violencia. Imaginen la potencia de casi 5,000 armas menos en las calles, armas que podrían haber sido utilizadas en actos delictivos, que podrían haber causado dolor y sufrimiento. Estas armas, ahora destruidas por la Secretaría de la Defensa Nacional, representan una victoria para la seguridad y la tranquilidad de todos.
Más allá de las cifras, lo verdaderamente importante es el cambio de mentalidad que promueve esta campaña. No se trata solo de retirar armas de circulación, sino de sembrar la semilla de la paz en la sociedad. Se trata de fomentar una cultura donde la fraternidad y la justicia prevalezcan sobre la violencia, donde el poder no se mida por la capacidad de dañar, sino por la capacidad de construir un futuro mejor. Como bien lo ha expresado la Presidenta Claudia Sheinbaum, la verdadera felicidad no reside en el dinero ni en el poder que otorga un arma, sino en la construcción de una sociedad justa y equitativa, donde todos tengan acceso a la educación, la salud y un ingreso digno.
La participación ciudadana es crucial en esta tarea. La entrega voluntaria y anónima de armas es un acto de valentía y responsabilidad, un compromiso con la paz y la seguridad de nuestras comunidades. Y no solo los adultos están involucrados en esta transformación, la participación de la infancia, intercambiando juguetes bélicos por educativos, demuestra que la cultura de paz se construye desde la raíz, educando a las nuevas generaciones en valores de convivencia y respeto.
El esfuerzo conjunto de las autoridades, la iglesia, las familias y las comunidades es fundamental para el éxito de esta iniciativa. Las Jornadas por la Paz, la reforestación, los juegos de ajedrez en escuelas y centros comunitarios, las visitas casa por casa para identificar las necesidades de la población, las Ferias de Paz con sus servicios y actividades, y la entrega de tarjetas del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, son ejemplos concretos de cómo se está trabajando para construir la paz desde diferentes frentes.
La paz no es una meta inalcanzable, sino un camino que se recorre con perseverancia y compromiso. Cada arma entregada, cada juguete bélico intercambiado, cada árbol plantado, cada conversación con una familia, cada programa de apoyo implementado, es un paso más hacia la construcción de un México más seguro y pacífico. Sigamos abrazando la bandera de la paz, sigamos trabajando juntos para construir un futuro donde la violencia sea cosa del pasado.
Fuente: El Heraldo de México