La noche del sábado pasado vibró al ritmo del ska en el Palacio de los Deportes. Los Estrambóticos, con más de tres décadas de trayectoria, demostraron por qué siguen siendo uno de los referentes del género en México. Una verdadera "Invasión Estrambótica" que inundó el Domo de Cobre con energía desbordante y una conexión inigualable con su público. Pasadas las nueve de la noche, la Ciudad de México se dibujó en las pantallas del recinto, anunciando la llegada de la banda. La euforia se desató desde los primeros acordes de "El gran infierno" y "Camino a ninguna parte", himnos coreados por más de diez mil almas que se entregaron por completo a la fiesta ska.

El ambiente se encendió aún más con la participación de La Mosca, quienes no solo abrieron el concierto, sino que también compartieron escenario con Los Estrambóticos para interpretar "El mosquito", un clásico que puso a bailar a todos los presentes. Vestidos mayoritariamente de amarillo, Los Estrambóticos agradecieron la entrega del público y continuaron la noche con una ráfaga de éxitos como "Tan cerca y tan lejos", "Bailando solo", "Dejar atrás" y "Oir tu voz". Cada canción fue recibida con una ovación, demostrando la fidelidad y el cariño que la banda ha cosechado a lo largo de los años.

Con la picardía que los caracteriza, Los Estrambóticos recordaron el reciente fenómeno viral de la "kiss cam" e invitaron a las parejas a participar, creando un ambiente divertido y cómplice entre la banda y sus seguidores. Afortunadamente, las parejas proyectadas en las pantallas se sumaron al juego sin ningún momento incómodo, demostrando el buen rollo que reinaba en el Palacio de los Deportes.

El repertorio continuó con una mezcla de clásicos y sorpresas. Desde el cover de Gloria Trevi, "El recuento de los daños", hasta la energía desbordante de "Lucha y resiste" y "No necesitas a nadie". Un recorrido por su historia musical que culminó con un emotivo video que repasaba los momentos más importantes de su carrera. Tras el emotivo recorrido visual, la banda regresó al escenario con un cambio de vestuario, ahora de blanco impoluto, para interpretar "Por siempre" junto a DLD, un momento que quedará grabado en la memoria de los asistentes.

La intensidad del concierto alcanzó su punto máximo con "La cerveza y el dolor" y "Peter Punk", canciones que desataron el slam en la pista. Un mar de personas de todas las edades se unió en un frenesí colectivo, demostrando la fuerza unificadora del ska. La sorpresa de la noche llegó con la presentación de la actriz Violeta Isfel, a quien Pino, vocalista de la banda, presentó como "una súper persona, mi manita". Juntos interpretaron "Ciegos de amor", un momento lleno de emotividad y complicidad.

El broche de oro llegó con "La herida", uno de los himnos más emblemáticos de Los Estrambóticos. El Palacio de los Deportes se convirtió en un karaoke masivo, con miles de voces cantando al unísono, acompañadas por los músicos invitados que se unieron a la banda en el escenario para cerrar una noche inolvidable. Una noche que confirmó la vigencia y la energía inagotable de Los Estrambóticos, una banda que sigue escribiendo su historia en la escena musical mexicana.