La educación, pilar fundamental para el desarrollo individual y colectivo, se enfrenta a numerosos desafíos, especialmente en contextos de pobreza extrema. Para miles de niñas y niños mexiquenses, el inicio del ciclo escolar 2025-2026 representa no solo la promesa de nuevos conocimientos y experiencias, sino también la incertidumbre de contar con los recursos necesarios para afrontar este reto. Conscientes de esta realidad, la Junta de Asistencia Privada del Estado de México (JAPEM), en un conmovedor llamado a la solidaridad, ha lanzado una campaña de donación de útiles escolares que busca tender un puente de esperanza y oportunidades para los pequeños que más lo necesitan.

Imaginemos por un instante la ilusión de un niño o niña al estrenar una mochila llena de cuadernos nuevos, lápices de colores vibrantes y un estuche reluciente. Estos elementos, que para muchos pueden parecer insignificantes, se convierten en herramientas esenciales para el aprendizaje y el desarrollo de su potencial. Lamentablemente, para las familias que viven en condiciones de pobreza extrema, la adquisición de estos materiales representa un obstáculo económico que puede incluso llevar a la deserción escolar. Es aquí donde la generosidad de la sociedad se convierte en un factor determinante para romper este círculo vicioso y brindar a estos pequeños la oportunidad de un futuro mejor.

La JAPEM, organismo adscrito a la Secretaría del Bienestar del Estado de México, ha desplegado una amplia red de apoyo para garantizar que cada donativo llegue a quienes más lo necesitan. Con una trayectoria impecable en la atención a grupos vulnerables, la institución se encarga no solo de la procuración de atención médica, sino también de brindar techo y hogar a niños y ancianos en situación de abandono, promoviendo la superación y el desarrollo de comunidades enteras a través de la capacitación para el trabajo y la productividad. Esta nueva iniciativa, enfocada en la donación de útiles escolares, reafirma su compromiso con la construcción de un Estado de México más justo e inclusivo.

Hasta el 29 de agosto, cada uno de nosotros tiene la oportunidad de sumarse a esta noble causa y contribuir a que ningún niño o niña mexiquense se quede sin la posibilidad de estudiar por falta de recursos. Desde un cuaderno hasta una mochila, cada aportación, por pequeña que parezca, se convierte en una pieza fundamental para construir un futuro más brillante para estos pequeños. La JAPEM ha facilitado el proceso de donación, estableciendo un centro de acopio en sus instalaciones ubicadas en Guillermo Prieto número 609, Barrio San Sebastián, Toluca. Para aquellos que no puedan acudir personalmente, se ha habilitado la línea telefónica 722 277 72 90 extensión 117 y el correo electrónico [email protected] para resolver cualquier duda o coordinar la entrega de los donativos.

Pero la solidaridad no se limita a la temporada escolar. La JAPEM mantiene de forma permanente una campaña de donación de alimentos no perecederos para familias en situación de pobreza extrema y vulnerabilidad. Arroz, frijol, aceite, latas de atún y otros productos básicos pueden marcar la diferencia entre la escasez y la seguridad alimentaria para muchas familias mexiquenses. Donar es un acto de amor y compasión que nos permite conectar con la realidad de quienes nos rodean y contribuir a la construcción de una sociedad más justa y solidaria.

Bajo el lema #EducaciónParaTodos, la JAPEM nos invita a romper barreras y a encender la chispa de la esperanza en el corazón de miles de niñas y niños. Cada útil escolar donado, cada alimento compartido, representa una oportunidad para que estos pequeños alcancen sus sueños y construyan un futuro sin límites. Únete a esta causa y hagamos la diferencia juntos. El futuro de nuestro estado está en nuestras manos.