
19 de julio de 2025 a las 02:10
Secretos de las alumnas UNAM con puntaje perfecto
El sueño de miles, la realidad de dos. Ana Sofía Pérez, de Ecatepec, Estado de México, y Lizette Cruz, de Ocosingo, Chiapas, han logrado lo que para muchos parece una quimera: un puntaje perfecto en el examen de admisión a la UNAM. De entre un océano de casi 20,000 aspirantes que lograron un lugar en la prestigiosa institución, estas dos jóvenes brillan con luz propia, alcanzando los 120 aciertos, una hazaña que las catapulta al inicio de sus carreras soñadas: Medicina para Ana Sofía y Ingeniería Aeroespacial para Lizette.
La historia de Ana Sofía es un testimonio de perseverancia. No llegó a la cima en su primer intento. Dos veces el anhelado ingreso se le escapó de las manos, experimentando la amargura de la derrota y la frustración que acompaña a tantos jóvenes en este competitivo proceso. "Ya me ha tocado vivir también un aspirante no seleccionado y es algo muy doloroso, muy pesado", confiesa con la voz teñida de emoción, recordando la dificultad de sobreponerse al rechazo. Sin embargo, la llama de su vocación por la medicina nunca se apagó. Desde la preparatoria, su inclinación por materias como morfología la guio hacia el camino que hoy, con esfuerzo y dedicación, ha logrado transitar. Su historia es un ejemplo inspirador para quienes, tras un tropiezo, se levantan con más fuerza para perseguir sus sueños.
Por otro lado, Lizette, con tan solo 18 años, encara el futuro con la misma determinación. La ingeniería aeroespacial, una carrera que exige rigor y pasión por las ciencias, la cautivó hace dos años. Su afinidad por los números, las ecuaciones, y la combinación de disciplinas como matemáticas, informática, física y electrónica, la impulsaron a dedicar ocho meses de intensa preparación. "No me lo esperaba", admite aún incrédula, "sigo en la etapa de negación". Su relato desvela las largas jornadas de estudio, desde las ocho de la mañana hasta la madrugada, una muestra palpable del sacrificio y la constancia que requiere alcanzar la excelencia. Lizette reconoce que la mayor batalla no se libra contra las complejidades de las materias, sino contra la propia mente. "Lo más difícil es mantenerte motivado", afirma, destacando la importancia de la autoconfianza y la perseverancia en el camino hacia el éxito.
Detrás de estos dos logros excepcionales se encuentra la figura del profesor Ulises Iván Torres, quien por tercer año consecutivo celebra el éxito de sus alumnos en el examen de la UNAM. Su método, basado en una preparación intensiva de ocho meses y constantes evaluaciones, permite a los jóvenes identificar sus debilidades y fortalecer sus conocimientos. "Los acostumbramos a muchas evaluaciones y eso para ellos es muy importante porque les permite revisar cuáles son sus errores y corregirlos", explica el profesor, subrayando la importancia de un aprendizaje continuo y la retroalimentación constante.
El ingreso de Ana Sofía y Lizette, junto con los otros 48,560 nuevos estudiantes que se incorporan a la UNAM, representa una inyección de talento y esperanza para el futuro. Sus historias, entrelazadas por el esfuerzo, la dedicación y la búsqueda del conocimiento, inspiran a las nuevas generaciones a perseguir sus sueños con tenacidad, recordándonos que el camino hacia el éxito, aunque a veces tortuoso, siempre es posible de transitar con perseverancia y pasión.
Fuente: El Heraldo de México