La polémica en torno al fallecimiento de Daniel Bisogno y las declaraciones de su hermano, Alex, continúa generando controversia. A pesar de que hace unas semanas Alex Bisogno afirmaba haber recibido disculpas por parte de Pati Chapoy tras sus fuertes declaraciones, la situación parece haber dado un giro inesperado. Ahora, Alex vuelve a la carga con nuevas acusaciones, expresando su profundo malestar por la supuesta falta de empatía de la producción de Ventaneando hacia su padre durante el difícil momento que atravesaron. Este nuevo capítulo en la historia añade más leña al fuego, reavivando las interrogantes y especulaciones que rodean el caso.

La depresión que Alex Bisogno confiesa haber sufrido tras las declaraciones de Pati Chapoy nos da una idea de la magnitud del impacto emocional que estas tuvieron en la familia. El sentir que no se les permitió dar su versión de los hechos, que no se les escuchó, parece haber ahondado aún más el dolor por la pérdida de Daniel. El reclamo de Alex de una llamada, de un gesto de preocupación genuina por parte de Chapoy, revela la profunda decepción que siente hacia alguien a quien, según sus palabras, le tenía cariño y respeto.

La entrevista concedida a Marco Antonio Silva se convierte en un nuevo escenario para la denuncia pública de Alex. La exhibición de documentos relacionados con la denuncia por extorsión a la exempleada doméstica de Daniel Bisogno parece un intento de desmentir las insinuaciones sobre un posible robo por parte de la familia. Con esta acción, Alex busca no solo limpiar su nombre y el de su familia, sino también señalar la gravedad de las acusaciones vertidas en un programa de alcance nacional, sin, según él, la debida comprobación.

La frase "me debieron de haber llamado" resuena con fuerza, reflejando la frustración de Alex por la falta de comunicación y la precipitación a la hora de emitir juicios. Su insistencia en que hubiera ofrecido una explicación si se le hubiera preguntado, plantea la hipótesis de que quizás todo este malentendido se podría haber evitado con un simple diálogo. El hecho de que se sienta ignorado y desacreditado públicamente, sin la oportunidad de defenderse, agrava aún más la situación.

A pesar de afirmar que no culpa a nadie, las palabras de Alex transmiten un claro reproche hacia la forma en que se manejó la información y la falta de sensibilidad hacia el dolor de una familia que acababa de perder a un ser querido. Este nuevo episodio deja muchas preguntas sin respuesta y abre la puerta a futuras revelaciones que podrían arrojar más luz sobre este complejo y doloroso asunto. La tensión entre Alex Bisogno y Pati Chapoy parece lejos de disiparse, y la opinión pública permanece atenta al desarrollo de esta controversia mediática.