Prepárense regiomontanos, porque este jueves 17 de julio el calor no dará tregua. El sol brillará con intensidad desde temprano, despertándonos con una aparente calma de 24°C, pero no se dejen engañar, esa bruma matutina, tan característica de nuestra ciudad en esta época, es un claro indicio de la humedad que nos acompañará y que hará que la temperatura se sienta mucho más intensa.

Al avanzar el día, el termómetro no tendrá piedad, alcanzando los 36°C, aunque la sensación térmica, esa que realmente sentimos en nuestra piel, podría llegar hasta los 39°C. Imaginen, casi 40°C abrazándonos como un horno. Esta combinación de calor y humedad, tan típica del verano regiomontano, es una verdadera prueba de resistencia, especialmente para los más vulnerables: niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas. Por eso, la hidratación constante es clave, lleven siempre consigo una botella de agua y no esperen a tener sed para beber.

Al caer la noche, aunque el termómetro marque un descenso a los 28°C, el bochorno persistirá, haciendo que conciliar el sueño sea una verdadera odisea, sobre todo para quienes no cuentan con aire acondicionado o una buena ventilación. Un consejo: antes de dormir, tomen una ducha con agua tibia, no fría, para regular la temperatura corporal y lograr un descanso más placentero.

Este calor intenso no es una sorpresa, forma parte del ciclo natural de nuestro clima, influenciado por el sistema de alta presión del Pacífico y la humedad que nos llega del Golfo de México. Julio, históricamente el mes más caluroso del año en nuestra región, nos recuerda la importancia de adaptarnos y tomar precauciones.

Más allá de la incomodidad, este calor extremo puede ser un riesgo para la salud. La deshidratación, el golpe de calor y otras afecciones son consecuencias que podemos evitar si tomamos las medidas adecuadas. Además de la hidratación constante, es fundamental usar ropa ligera y de colores claros, evitar la exposición directa al sol en las horas pico, buscar lugares con sombra y ventilación, y utilizar protector solar, incluso en días nublados.

No se trata solo de sobrevivir al calor, se trata de disfrutar el verano de forma segura y responsable. Informémonos, consultemos el pronóstico del tiempo y sigamos las recomendaciones de Protección Civil. Cuidémonos entre todos, y recordemos que un pequeño gesto, como ofrecer agua a alguien que lo necesite, puede marcar la diferencia en un día como este. ¡Ánimo, regiomontanos, que juntos podemos superar esta ola de calor!