Un hogar, un abrazo, un futuro. Eso es lo que se respiraba en el aire durante el emotivo evento presidido por la gobernadora Tere Jiménez, donde varias familias aguascalentenses vieron cristalizado el sueño de ampliar sus hogares y sus corazones a través de la adopción. No se trataba simplemente de la entrega de documentos legales, sino de la entrega de amor, esperanza y la promesa de un futuro brillante para niñas, niños y adolescentes que ahora cuentan con un espacio seguro y lleno de cariño donde crecer.

La imagen de la gobernadora entregando personalmente la custodia de estos pequeños a sus nuevas familias, transmite mucho más que una simple formalidad. Es el reflejo de un compromiso por parte del gobierno estatal con el bienestar de la infancia y la adolescencia, una apuesta por reconstruir vidas y fortalecer el tejido social desde la base: la familia. Sus palabras, "Cuídenlos mucho; la vida les ha dado esta gran oportunidad…", resonaron en el corazón de los presentes, no como una orden, sino como una exhortación llena de emoción y esperanza. Una invitación a construir un futuro mejor, de la mano de estos pequeños que ahora tienen la oportunidad de escribir una nueva historia.

El proceso de adopción no es sencillo. Requiere un compromiso profundo, una gran responsabilidad y una inmensa capacidad de amar. Por ello, la entrega de los Certificados de Idoneidad a familias que han demostrado poseer las cualidades necesarias para brindar un hogar adecuado, cobra especial relevancia. Es un reconocimiento a su vocación de servicio, a su generosidad y a su disposición para abrir sus puertas y sus corazones a quienes más lo necesitan. Representa la culminación de un riguroso proceso de evaluación, pero también el inicio de una hermosa aventura llena de retos y satisfacciones.

Las palabras de Aurora Jiménez Esquivel, primera voluntaria y presidenta del Sistema DIF Estatal, reforzaron la importancia de este programa al enfatizar el derecho fundamental de todos los niños a tener una familia. Un derecho que, lamentablemente, no siempre se cumple. Con su mensaje, "Les encargamos mucho a nuestras niñas y niños…", se establece un puente de confianza y colaboración entre el DIF Estatal y las familias adoptivas, un compromiso compartido para garantizar el bienestar de estos pequeños.

La directora general del DIF Estatal, Mónica Becerra Moreno, resaltó el esfuerzo de la institución por fortalecer a la familia como núcleo de la sociedad. Sus palabras reflejan la convicción de que un hogar lleno de amor es el mejor entorno para el desarrollo integral de las niñas, niños y adolescentes. La confianza depositada en el DIF Estatal por parte de estas familias es un testimonio del trabajo realizado y un aliciente para seguir impulsando programas que promuevan la adopción y el acogimiento familiar.

La entrega de 8 Custodias Preadoptivas, 2 Custodias de Acogimiento Familiar y 16 Certificados de Idoneidad, no son simples cifras. Representan historias de vida, sueños compartidos y la esperanza de un futuro mejor para cada uno de estos niños y adolescentes. La presencia de autoridades como el diputado local Humberto Montero de Alba, la secretaria de la Familia, Norma Adela Guel Saldívar, y Rosalba Ramírez Salazar, titular de la Unidad de Igualdad de Género y Derechos Humanos del Poder Judicial del Estado, ratifica el compromiso interinstitucional para garantizar el derecho a la familia y el bienestar de la infancia en Aguascalientes. Este evento, más que una ceremonia, es una celebración de la vida, del amor y de la esperanza. Un recordatorio de que todos podemos contribuir a construir un mundo mejor para las futuras generaciones.