
17 de julio de 2025 a las 00:25
¿Supermercados X en quiebra? 60 tiendas cierran.
La incertidumbre se ha apoderado de los consumidores estadounidenses tras el anuncio del gigante de supermercados Kroger sobre el cierre de 60 tiendas en los próximos 18 meses. El temor a una posible quiebra y la preocupación por el futuro de los empleados son las principales inquietudes que han surgido a raíz de esta noticia. Sin embargo, Kroger ha salido al paso de estas especulaciones, asegurando que esta decisión forma parte de una estrategia de ajuste operativo y no es un indicio de problemas financieros graves. Lejos de ser un síntoma de debilidad, la compañía lo presenta como una oportunidad para optimizar recursos y mejorar la rentabilidad, concentrando sus esfuerzos en localizaciones más estratégicas.
Esta reestructuración, que comenzará en Texas, implica un cambio de enfoque para la emblemática cadena de supermercados, fundada en 1883 por Bernard Kroger en Cincinnati. Con más de un siglo de historia y un crecimiento exponencial a lo largo de los años, Kroger se ha consolidado como un referente en el sector, operando 2,731 tiendas en 35 estados y el Distrito de Columbia hasta junio de 2025, bajo diversas marcas como Smith's, Ralphs, King Soopers y Fred Meyer.
Ronald Sargent, presidente y director ejecutivo interino de Kroger, ha explicado que el cierre de estas 60 tiendas, consideradas de bajo rendimiento, no significa un abandono del mercado, sino una redistribución estratégica de sus recursos. La empresa confía en que esta medida permitirá trasladar las ventas de las tiendas afectadas a otras ubicaciones más rentables, optimizando así su funcionamiento global. De hecho, Kroger planea la apertura de 30 nuevas tiendas en puntos estratégicos para el año 2026, demostrando su compromiso con el crecimiento y la expansión, a pesar de los cierres anunciados.
En cuanto a los empleados de las tiendas que cerrarán sus puertas, Kroger ha asegurado que se les ofrecerá la posibilidad de reubicarse en las nuevas tiendas, garantizando así la continuidad laboral de la mayoría de su personal. Aquellos que decidan no aceptar la reubicación, serán indemnizados conforme a la legislación vigente, protegiendo sus derechos y ofreciendo una salida justa. Esta medida busca minimizar el impacto social de los cierres y demuestra la responsabilidad de Kroger hacia sus empleados.
En resumen, la decisión de Kroger de cerrar 60 tiendas no debe interpretarse como una señal de alarma, sino como una estrategia de optimización y reestructuración para mejorar la rentabilidad y asegurar su futuro en el competitivo mercado de los supermercados. La apertura de nuevas tiendas y la preocupación por la reubicación de sus empleados son indicadores de la solidez de la compañía y su compromiso con el crecimiento sostenible. En un contexto económico cambiante, la adaptación y la innovación son claves para la supervivencia, y Kroger parece estar apostando por ello con esta decisión estratégica. Habrá que seguir de cerca la evolución de esta reestructuración y su impacto en el mercado, pero por el momento, la información disponible apunta a una reorganización interna y no a una crisis inminente.
Fuente: El Heraldo de México