
16 de julio de 2025 a las 11:10
SAT y Profeco: Revisión a Personal
La colaboración entre el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) marca un hito en la lucha contra la corrupción y el fortalecimiento de la confianza ciudadana. Este convenio, que estipula la aplicación de rigurosas pruebas de control de confianza al personal de Profeco por parte de expertos del SAT, no es simplemente un trámite administrativo, sino una declaración de intenciones: un compromiso inquebrantable con la transparencia y la ética en el servicio público.
Imaginen un escenario donde cada funcionario público, desde el nivel más alto hasta el que tiene contacto directo con el ciudadano, actúe con la certeza de que su conducta es evaluada no solo en términos de eficiencia, sino también de integridad. Este es el México que se busca construir con este tipo de acuerdos. No se trata solo de castigar la corrupción, sino de prevenirla desde la raíz, fomentando una cultura de la honestidad y la responsabilidad.
Las pruebas que se aplicarán, que abarcan desde evaluaciones psicológicas y toxicológicas hasta socioeconómicas y psicotécnicas, pintan un panorama completo del perfil del funcionario. No se trata de una simple revisión superficial, sino de un análisis profundo que busca garantizar que quienes ostentan cargos públicos tengan la capacidad y la rectitud necesarias para ejercerlos. Este es un paso fundamental para reconstruir la confianza en las instituciones, una confianza que, lamentablemente, se ha visto erosionada a lo largo de los años.
El convenio, enmarcado en los objetivos estratégicos del Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030, no se limita a un mero intercambio de información entre instituciones. Representa una visión a largo plazo: la de un Estado de derecho sólido, donde la impunidad no tenga cabida. La honestidad y la integridad, como bien lo señaló el jefe del SAT, Antonio Martínez Dagnino, son los cimientos sobre los que se debe construir una sociedad justa y próspera.
Es importante destacar que este esfuerzo no se queda en el ámbito interno de las instituciones. Los beneficiarios directos son los ciudadanos, en especial los consumidores, quienes podrán tener la certeza de que sus derechos son defendidos por funcionarios probos y comprometidos. La Profeco, como organismo encargado de proteger los derechos de los consumidores, se fortalece con este convenio, garantizando que su personal actúe con la ética y la profesionalidad que demanda la ciudadanía.
Las palabras del titular de Profeco, Iván Escalante Ruiz, refuerzan este compromiso con la ciudadanía. Al destacar la instrucción de la presidenta Claudia Sheinbaum de fomentar un gobierno honesto y cercano al pueblo, Escalante no solo subraya la importancia de la transparencia, sino que también coloca al ciudadano en el centro de la gestión pública.
Los tres puntos que Escalante destaca del convenio – la mayor eficacia y operatividad de la Profeco, la profesionalización homogénea del personal y la consolidación de una vocación de servicio alineada con los valores institucionales – resumen a la perfección el alcance de esta colaboración. No se trata de un simple acto protocolario, sino de una estrategia integral que busca transformar la cultura del servicio público desde adentro.
Finalmente, la convicción del SAT de avanzar en el combate a la corrupción no se limita a la firma de convenios. Representa una postura firme y decidida de construir un México donde la transparencia y la rendición de cuentas sean la norma, no la excepción. Este es un camino largo y complejo, pero con acciones concretas como esta, se avanza con paso firme hacia un futuro más justo y equitativo para todos.
Fuente: El Heraldo de México