
16 de julio de 2025 a las 09:20
¡Presidenta recibe apoyo total!
La embestida mediática contra la Presidenta Claudia Sheinbaum, orquestada desde fuera de nuestras fronteras, no solo atenta contra su figura, sino contra la soberanía misma de México. Se trata de una estrategia perversa, un verdadero lawfare, que busca desestabilizar al país sembrando la duda y la desconfianza en las instituciones democráticamente elegidas. No podemos permitir que voces extranjeras, amparadas en la notoriedad y el acceso a plataformas mediáticas, dicten el rumbo de nuestra nación. Sus acusaciones infundadas, carentes de cualquier sustento jurídico o probatorio, buscan minar la legitimidad de un gobierno que trabaja incansablemente por el bienestar del pueblo mexicano.
Es evidente que este tipo de ataques no son aislados, sino parte de una ofensiva global de desinformación, una "guerra de percepción" como la denominan algunos analistas, que pretende manipular la opinión pública y erosionar la confianza en los procesos democráticos. Se construyen narrativas de descrédito, se amplifican rumores y se difunden falsedades con la intención de crear un clima de incertidumbre y desestabilización. Como bien apuntaba Pierre Bourdieu, se trata de una forma de colonización simbólica, donde se imponen ficciones como si fueran verdades irrefutables, contaminando el juicio público con sospechas sin fundamento.
Ante esta avalancha de desinformación, es fundamental contraponer la verdad, los hechos concretos y los resultados tangibles. El caso de Chiapas, bajo el liderazgo del Gobernador Eduardo Ramírez Aguilar, en estrecha coordinación con la Presidenta Sheinbaum y el Gabinete de Seguridad, es un ejemplo paradigmático de cómo se puede construir paz y seguridad a través de una estrategia integral basada en inteligencia, tecnología y, sobre todo, en la proximidad con la ciudadanía. La disminución del 50% en los homicidios dolosos durante el primer semestre de 2025, en comparación con el mismo periodo del año anterior, no es producto de la casualidad, sino de un trabajo coordinado y de una voluntad política inquebrantable. Mientras algunos se dedican a sembrar la discordia desde la comodidad del extranjero, en Chiapas se construye la paz con trabajo duro y resultados concretos.
Este modelo de colaboración entre la Presidencia y el gobierno estatal de Chiapas no solo es eficaz, sino también moralmente ejemplar. Representa un federalismo funcional, legítimo y ético, donde la Presidenta impulsa una estrategia nacional centrada en la prevención y los derechos humanos, y el Gobernador la ejecuta con precisión y conocimiento profundo del tejido social.
Frente a la difamación y la mentira, reafirmamos nuestro compromiso con la verdad y la justicia. No existe acusación válida sin pruebas, ni narrativa que pueda sustituir la evidencia. Lo que realmente importa son los resultados, las políticas públicas efectivas que protegen vidas y reconstruyen la confianza en las instituciones. Defender a la Presidenta Claudia Sheinbaum es defender la verdad, el orden constitucional y la paz que con tanto esfuerzo hemos comenzado a construir. En tiempos de caos mediático, apostamos por la legalidad, la memoria y la esperanza. Apostamos por México.
Fuente: El Heraldo de México