La repentina partida de Julián Figueroa sigue generando olas en el mundo del espectáculo, y las recientes declaraciones de Imelda Garza Tuñón han avivado las llamas de la controversia. La joven viuda relató un episodio inquietante ocurrido la noche anterior al fallecimiento del cantante: Julián, según su testimonio, experimentaba alucinaciones, viendo serpientes por todas partes. Esta visión, expresada en voz alta, habría perturbado profundamente a su pequeño hijo, Juliancito, llevando a Imelda a pedirle a Julián que se retirara para no asustar al niño.

Este relato ha resonado con fuerza en los medios, dividiendo la opinión pública y reavivando las especulaciones sobre las circunstancias que rodearon la muerte del hijo de Maribel Guardia y Joan Sebastian. A pesar de que la causa oficial del deceso fue un infarto al miocardio, el misterio persiste dos años después, alimentado por rumores y teorías que se niegan a desaparecer.

En medio de este torbellino de conjeturas, las palabras de Imelda han encontrado una respuesta directa de Maribel Guardia. La reconocida actriz y cantante ha lamentado públicamente que la viuda de su hijo hable mal de él, defendiendo con vehemencia la imagen de Julián como padre. “Me da pena que hable mal de mi hijo; mi hijo fue un extraordinario padre con José Julián”, declaró a la periodista Berenice Ortiz.

Maribel ha pintado un retrato conmovedor de la relación entre Julián y su hijo, destacando la dedicación y el amor que el joven padre prodigaba a su pequeño. “Lo que me impresionaba de José Julián son los recuerdos que tenía de su padre: ‘Mi papito era el que jugaba conmigo’, ‘Mi papito es el que pintaba conmigo’, ‘Mi papito jugábamos videojuegos’. Él le dedicaba todo el tiempo que podía al niño; fue un padre muy amoroso y muy presente”, relató con emotividad. La actriz enfatiza el legado de amor que Julián dejó a su hijo, un tesoro invaluable que el niño atesora en su memoria.

Las declaraciones de Imelda no se limitan a las alucinaciones de Julián. La joven viuda también ha insinuado la posibilidad de una infidelidad por parte de Marco Chacón, esposo de Maribel Guardia, con una de sus estudiantes universitarias. Este rumor, amplificado por los comentarios del periodista Gustavo Adolfo Infante, quien incluso sugirió la separación del abogado de la institución educativa donde impartía clases, ha sido categóricamente desmentido por Maribel.

La actriz ha defendido la solidez de su matrimonio de 28 años, destacando el respeto mutuo como pilar fundamental de su relación con Marco Chacón. “Nunca me ha levantado la voz, ni él a mí, ni yo a él”, afirmó, subrayando la importancia de este valor para la perdurabilidad de una pareja.

Más allá de ser su esposo, Maribel describe a Marco como una figura paterna para Julián, una relación marcada por el cariño y la admiración mutua. “Marco amaba a Julián y Julián amaba a Marco, entre ellos había más que una relación; había una química muy especial porque se parecía en muchas cosas. Marco fue un segundo padre increíble para Julián”, concluyó la actriz, cerrando filas en torno a su familia y buscando preservar el recuerdo de su hijo en medio de la tormenta mediática. La historia, sin duda, continuará generando debate y nuevas revelaciones en los próximos días.