
13 de julio de 2025 a las 07:05
Extranjero se orina en Chapultepec: "¿Sin opción?"
La viralización del video de un turista extranjero orinando en el Bosque de Chapultepec ha desatado una oleada de indignación en redes sociales. El argumento del turista, quien alegó no tener efectivo para acceder a un baño público y mostró su cartera llena de tarjetas de crédito como prueba, no ha convencido a la usuaria de TikTok que lo confrontó ni a la gran mayoría de los internautas. Su justificación, “No tenía otra opción, lo siento mucho, tenía que ir”, se percibe como una falta de respeto no solo a las normas cívicas, sino también al patrimonio cultural de México, considerando la importancia histórica y ecológica del Bosque de Chapultepec. La usuaria que grabó el incidente cuestionó la falta de previsión del turista: "¿Y estás aquí en México sin dinero?". Su increpación, "¿Ella habla español y ¿no te pudo decir que no te puedes orinar ahí?", dirigida a la acompañante del turista, pone de manifiesto la corresponsabilidad que se le atribuye a quien, presuntamente, podría haberle informado sobre las normas básicas de convivencia en el país. La denuncia pública a través de TikTok, con la frase "haz lo tuyo", busca no solo exhibir la conducta inapropiada, sino también ejercer presión social para que se apliquen las sanciones correspondientes.
Este incidente, lamentablemente, no es un caso aislado. Se suma a una serie de episodios recientes protagonizados por turistas extranjeros en México que, amparados quizá en una errónea percepción de impunidad o en una falta de sensibilidad cultural, incurren en faltas de respeto a las normas y al patrimonio del país. Recordamos, por ejemplo, el caso de la turista estadounidense que rayó la Peña de Bernal, en Querétaro, justificando su acto con un simple: "Soy americana". Estos actos no solo dañan la imagen del turismo internacional, sino que también generan un sentimiento de frustración y enojo entre la población local, que ve vulnerado su patrimonio cultural y natural.
La Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México es clara al respecto. Orinar o defecar en la vía pública se considera una infracción al entorno urbano, con multas que pueden alcanzar los 4,500 pesos, arresto o trabajo comunitario. Es fundamental que tanto residentes como visitantes conozcan y respeten estas normas, contribuyendo a la convivencia pacífica y a la preservación de los espacios públicos.
Más allá de la sanción económica o administrativa, este tipo de incidentes nos invitan a reflexionar sobre la importancia de la educación cívica y el respeto a las diferentes culturas. La globalización y la facilidad para viajar no deben ser excusa para olvidar las normas básicas de convivencia y el respeto a las leyes locales. Es crucial fomentar una cultura de responsabilidad entre los turistas, promoviendo la conciencia sobre el impacto de sus acciones en el entorno y en la comunidad que los recibe. La difusión de información sobre las normas cívicas en diferentes idiomas, la señalización adecuada en los espacios públicos y la colaboración entre autoridades y prestadores de servicios turísticos son elementos clave para prevenir este tipo de situaciones y construir un turismo más responsable y respetuoso. El patrimonio cultural y natural de México es un tesoro que debemos proteger entre todos, tanto residentes como visitantes. El respeto a las normas y la convivencia pacífica son la base para un turismo sostenible y enriquecedor para todos.
Fuente: El Heraldo de México