En un acto que subraya la importancia de la ética y la responsabilidad dentro del ámbito judicial, el presidente de la Barra Mexicana del Colegio de Abogados de Hidalgo, Antonio Márquez Hidalgo, otorgó el premio estatal de jurisprudencia a Rufino León, recientemente electo magistrado del Tribunal de Disciplina Judicial. Este reconocimiento no solo destaca la brillante trayectoria de León, sino que también simboliza la esperanza depositada en él para fortalecer la justicia en México.

Márquez Hidalgo, en su discurso, elogió la destacada labor del magistrado León, quien obtuvo un respaldo contundente de más de cuatro millones de votos a nivel nacional en la pasada jornada electoral. Esta abrumadora muestra de confianza ciudadana, según Márquez Hidalgo, garantiza que el Tribunal de Disciplina Judicial estará liderado por un profesional reconocido por su integridad y compromiso con la ley. "La elección del magistrado León es un testimonio del deseo de la ciudadanía por una justicia imparcial y eficaz", afirmó el presidente de la Barra de Abogados. "Su experiencia y su probada capacidad nos aseguran que estará a la altura de este importante desafío".

Visiblemente emocionado, el magistrado electo, Rufino León, expresó su gratitud por el reconocimiento a su trayectoria. "Este premio no es solo para mí, sino para todos aquellos que creen en un México más justo", declaró. León hizo hincapié en la importancia de la confianza ciudadana depositada en él, y reiteró su compromiso de trabajar incansablemente para honrar ese respaldo. "Asumo este cargo con la firme convicción de contribuir a la construcción de un sistema judicial más transparente y responsable", aseguró.

Recordando su pasado como secretario de Movilidad y Transporte de Hidalgo, León reconoció la deuda histórica que México tiene con la justicia. Se comprometió a trabajar arduamente para saldar esa deuda, enfatizando la necesidad de contar con los mejores perfiles en la impartición de justicia. "No podemos permitir que la impunidad siga reinando en nuestro país", declaró con vehemencia. "Es nuestro deber garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a una justicia pronta y expedita".

El magistrado electo iniciará sus funciones el próximo 1 de septiembre, para un periodo de seis años. Este tiempo, según León, será crucial para implementar la reforma judicial y modificar el sistema de impartición de justicia en el país. "Tenemos una oportunidad histórica para transformar la justicia en México", afirmó. "Debemos aprovecharla al máximo para construir un sistema que garantice la igualdad y el respeto a los derechos de todos".

Finalmente, León subrayó la importancia de socializar la labor del Tribunal de Disciplina Judicial. Reconociendo el desconocimiento generalizado de la ciudadanía sobre sus funciones, se comprometió a trabajar en la creación de canales de comunicación más efectivos. "Es fundamental que la sociedad conozca nuestro trabajo y comprenda nuestra misión", explicó. "Solo así podremos construir una verdadera cultura de justicia en nuestro país". La iniciativa de León de acercar el tribunal a la ciudadanía promete no solo una mayor transparencia, sino también una participación más activa de la sociedad en la construcción de un sistema judicial más justo y equitativo.