La incertidumbre ha rondado a la figura de Susana Zabaleta en las últimas semanas, como un susurro insistente que se propaga entre los ecos del mundo del espectáculo. Un rumor, originado por las declaraciones del cantante y compositor Francisco Céspedes, apuntaba a un presunto diagnóstico de cáncer linfático que la actriz habría enfrentado entre 2022 y 2023. La noticia, como una piedra lanzada a un lago tranquilo, generó ondas expansivas de preocupación y especulación entre sus seguidores y la prensa. Sin embargo, la familia de Zabaleta ha salido al paso de estas afirmaciones, desmintiendo categóricamente la información.

Matías, hijo de la reconocida actriz y cantante, ha sido la voz cantante de la familia, afirmando con rotundidad que su madre se encuentra en perfecto estado de salud. Sus palabras, cargadas de seguridad y afecto, buscan acallar las voces que han propagado la inquietud. “Mi mamá está perfecta de salud y ha estado perfecta todo el tiempo”, declaró, haciendo hincapié en que cualquier información que no provenga directamente de la familia debe ser considerada como un simple rumor. Esta declaración, directa y contundente, busca proteger la tranquilidad de Susana y la de sus seres queridos, estableciendo un cordón sanitario contra la desinformación.

Por su parte, Rossy Pérez, representante de la artista, se ha unido a la defensa, calificando la información difundida como una “campaña” en contra de Zabaleta. Sus palabras, contundentes y firmes, apuntan a la intención maliciosa que podría esconderse detrás de la propagación del rumor. "No es real", afirma Pérez, rechazando de plano la necesidad de alimentar la polémica con más comentarios. La estrategia de silencio, de no dar pábulo a la especulación, busca desactivar la bomba informativa antes de que cause más daño.

En medio de la tormenta, Susana Zabaleta ha optado por la discreción. Su reciente aparición pública, en el evento de presentación del proyecto musical de su hijo Matías, fue una declaración en sí misma. Radiante y enfocada en apoyar el talento de su hijo, Zabaleta eligió cederle el protagonismo, demostrando que la familia es su prioridad. Su silencio sobre el tema de salud no es un signo de debilidad, sino una decisión consciente de no alimentar el rumor, de no dejarse arrastrar por la vorágine mediática.

Además, horas antes del evento, la actriz compartió en sus redes sociales imágenes recientes de una sesión fotográfica, en las que se la ve plena y vital. Estas imágenes, más que mil palabras, transmiten un mensaje de fortaleza y bienestar, un testimonio visual de que Susana Zabaleta disfruta plenamente de su presente.

La polémica, lejos de apagar su brillo, parece haberlo intensificado. La respuesta firme de la familia, la prudencia de la artista y el apoyo incondicional de sus seguidores, han tejido una red de protección alrededor de Susana Zabaleta. Una red que, más allá de acallar los rumores, reafirma su talento, su fortaleza y su innegable carisma. El tiempo, como suele suceder, se encargará de disipar las sombras y dejar brillar, con más fuerza que nunca, la luz de esta gran estrella.