
10 de julio de 2025 a las 05:25
Ancelotti: ¿Un año en la cárcel?
La sombra de la Hacienda española vuelve a cernirse sobre el mundo del fútbol. En esta ocasión, el afectado es Carlo Ancelotti, el aclamado entrenador del Real Madrid y actual seleccionador de Brasil, quien ha sido condenado por un tribunal madrileño a un año de prisión y una multa que asciende a la considerable suma de 386.000 euros. El delito que se le imputa es fraude fiscal, cometido durante su primera etapa al frente del club merengue, allá por el año 2014. Si bien la noticia ha generado un gran revuelo mediático, es importante destacar que, al ser una condena inferior a dos años y al no contar Ancelotti con antecedentes penales, no tendrá que ingresar en prisión.
Esta sentencia, que aún se encuentra en desarrollo y podría ser objeto de recurso, abre un nuevo capítulo en la compleja relación entre las estrellas del fútbol y el fisco español. Recordemos que no es la primera vez que un personaje de renombre en el deporte rey se ve envuelto en este tipo de controversias. Nombres como Messi, Cristiano Ronaldo o Neymar Jr. también han protagonizado episodios similares, lo que pone de manifiesto la necesidad de una mayor transparencia y un asesoramiento fiscal más riguroso en el ámbito deportivo.
En el caso concreto de Ancelotti, la acusación se centra en la presunta ocultación de ingresos derivados de sus derechos de imagen. Según la Fiscalía, el técnico italiano habría utilizado una estructura societaria opaca para eludir el pago de impuestos en España. Un argumento que la defensa del entrenador ha rebatido insistentemente, alegando desconocimiento de las irregularidades y asegurando que Ancelotti siempre ha actuado de buena fe.
La condena, sin embargo, plantea interrogantes sobre la gestión de la imagen y los ingresos de las grandes figuras del deporte. ¿Son conscientes de las implicaciones fiscales de sus contratos? ¿Reciben el asesoramiento adecuado por parte de sus representantes? Estas son algunas de las preguntas que surgen tras la sentencia a Ancelotti y que requieren una profunda reflexión.
Más allá de las consecuencias legales, este caso también podría tener un impacto en la imagen pública del entrenador. Ancelotti, conocido por su carácter afable y su trayectoria impecable, se ve ahora salpicado por un escándalo que, sin duda, empañará su reputación. Habrá que esperar para ver cómo gestiona esta crisis y cómo afecta a su futuro profesional.
Mientras tanto, el mundo del fútbol permanece expectante ante los próximos acontecimientos. La sentencia a Ancelotti es un recordatorio de que nadie, ni siquiera las grandes estrellas, está por encima de la ley. Y que la transparencia y el cumplimiento de las obligaciones fiscales son fundamentales, no solo para la salud del sistema, sino también para la credibilidad del deporte. Seguiremos informando a medida que se desarrollen los acontecimientos y se conozcan más detalles sobre este caso que, sin duda, marcará un antes y un después en la relación entre el fútbol y la Hacienda española.
Se espera que la defensa de Ancelotti presente un recurso ante la Audiencia Provincial de Madrid, argumentando que el entrenador ya regularizó su situación con Hacienda en 2015. Este recurso podría alargar el proceso judicial durante meses, e incluso podría revocar la sentencia condenatoria. Mientras tanto, la incertidumbre se cierne sobre el futuro del técnico italiano, que se encuentra en plena preparación para los próximos compromisos de la selección brasileña. ¿Afectará este caso a su rendimiento? ¿Podría incluso llegar a dimitir de su cargo? Son preguntas que, por el momento, no tienen respuesta.
Este caso también pone de manifiesto la complejidad del sistema fiscal español, que a menudo resulta difícil de comprender incluso para los expertos. La globalización y la movilidad de los deportistas añaden una capa extra de complejidad, lo que hace imprescindible contar con un asesoramiento fiscal especializado y actualizado. Es necesario que los clubes y los representantes de los jugadores asuman su responsabilidad en este sentido, para evitar que situaciones como la de Ancelotti se repitan en el futuro.
Fuente: El Heraldo de México