
9 de julio de 2025 a las 23:45
Sheinbaum por la paz: Desarme por la vida
En un México que busca tejer la paz en cada rincón de su territorio, la conmemoración del Día Internacional de la Destrucción de Armas de Fuego se convirtió en un escenario de esperanza. La Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, con la convicción que la caracteriza, no solo celebró la efeméride, sino que elevó la voz para reafirmar el compromiso del país con la construcción de una sociedad donde la armonía sea la protagonista. El programa "Sí al Desarme, Sí a la Paz", una iniciativa que ha logrado retirar 2 mil armas de fuego de las calles, se erige como un símbolo tangible de este esfuerzo colectivo. No se trata solo de números, sino de vidas transformadas, de familias que recuperan la tranquilidad y de comunidades que se reconstruyen desde la base de la confianza.
La Presidenta Sheinbaum Pardo, con una mirada puesta en el futuro, hizo un llamado a la acción, un llamado a la reflexión profunda sobre las raíces de la violencia. No basta con desarmar, es imperativo atender las causas que la originan, esas semillas de desigualdad, de falta de oportunidades, de resentimiento que germinan en los hogares, en los barrios, en cada espacio donde la convivencia se ve amenazada. La invitación es a abrazar la paz, no solo como un ideal abstracto, sino como un compromiso cotidiano que se traduce en acciones concretas. Educar para la convivencia, sembrar esperanza donde antes reinaba la desesperanza, ofrecer alternativas de vida donde la muerte parecía ser la única salida; ese es el camino que México ha decidido transitar.
La participación ciudadana es fundamental en esta cruzada por la paz. El programa "Sí al Desarme, Sí a la Paz" no es una iniciativa gubernamental aislada, es un reflejo del anhelo de un pueblo que dice "Sí" a un futuro diferente, un futuro donde las armas no sean sinónimo de silencio y temor, sino de seguridad y tranquilidad. La paz, como bien lo señaló la Presidenta, es una elección de vida, una decisión consciente que implica privilegiar la dignidad sobre el abuso, el respeto sobre la prepotencia, la inclusión sobre la discriminación. Es tender la mano a quien más lo necesita, ofrecer una oportunidad donde antes solo había un callejón sin salida.
El éxito de la Estrategia Nacional de Seguridad, con la reducción del 25% en la incidencia de homicidios dolosos, demuestra que la transformación es posible. Atender las causas de la violencia, fortalecer la Guardia Nacional, impulsar la inteligencia e investigación, y fomentar la coordinación entre las distintas instancias, son los pilares de esta estrategia que se traduce en resultados tangibles. La atención a los jóvenes, garantizando su acceso a la educación, la cultura y el deporte, es crucial para construir un futuro donde la violencia no tenga cabida. Invertir en la juventud es invertir en la paz, es sembrar las semillas de un México más justo, más equitativo y más próspero.
El camino hacia la paz no es un sendero fácil, requiere esfuerzo, perseverancia y la participación activa de todos los sectores de la sociedad. Sin embargo, las palabras de la Presidenta Sheinbaum Pardo, cargadas de optimismo y determinación, nos recuerdan que la paz es un objetivo alcanzable, un sueño que podemos convertir en realidad si trabajamos juntos, con convicción y esperanza. Un México en paz es un México donde la dignidad del pueblo se erige como bandera, un México donde la vida se celebra en cada rincón de su territorio.
Fuente: El Heraldo de México