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9 de julio de 2025 a las 20:10
Salarios justos y pensiones dignas para la seguridad de Oaxaca.
Un cambio palpable se respira en Oaxaca. La seguridad, pilar fundamental para el desarrollo y la tranquilidad de cualquier sociedad, está siendo reforzada no solo con estrategias operativas, sino también, y de manera crucial, con la dignificación de quienes la protegen. El Gobernador Salomón Jara Cruz ha anunciado un conjunto de medidas que buscan reconocer el valor y la dedicación de las mujeres y hombres que integran los cuerpos policiales del estado. No se trata simplemente de un aumento salarial, sino de una inversión en el bienestar y la seguridad futura de estos servidores públicos.
Este incremento, retroactivo al inicio del 2024, representa un respiro económico para los más de 8 mil elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y la Fiscalía General del Estado. Pasar de 12,921 a 13,257.73 pesos mensuales, aunque pueda parecer una cifra modesta, significa un reconocimiento tangible a su labor y un pequeño alivio ante la constante presión económica que enfrentan. Es una muestra del compromiso del gobierno con quienes arriesgan su vida a diario por la seguridad de las familias oaxaqueñas.
Pero las buenas noticias no se detienen ahí. La transición del régimen 36 al 33 en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es un paso fundamental para asegurar la salud y el bienestar a largo plazo de estos servidores públicos. Garantizar la continuidad del servicio médico para quienes se jubilen es una medida de justicia social que reconoce la dedicación y el sacrificio de quienes han servido al estado durante años. Es una inversión en la tranquilidad y la dignidad de quienes han entregado su vida al servicio de la comunidad.
El reconocimiento a la labor policial se ve reflejado en los resultados. Oaxaca ha ascendido del octavo al quinto lugar en el ranking nacional de seguridad. Este logro, sin duda, es fruto del esfuerzo conjunto de las autoridades y de la dedicación de los cuerpos de seguridad. Es un testimonio de la efectividad de las estrategias implementadas y de la valentía de quienes las ejecutan. Sin embargo, la lucha por la seguridad es una tarea continua, y el gobierno estatal lo entiende. Por ello, se ha propuesto no solo mantener estos logros, sino superarlos.
La reforma a la Ley de Pensiones para las y los integrantes de las instituciones de seguridad pública, enviada al Congreso local, es un paso audaz hacia un futuro más seguro para quienes protegen a la sociedad oaxaqueña. Jubilarse a los 50 años, con 20 años de servicio y una pensión del 40%, que puede incrementarse hasta el 60% e incluso llegar al 100% en ciertos casos, es una promesa de tranquilidad para quienes han dedicado su vida al servicio público. Es un reconocimiento a la exigencia física y emocional que implica la labor policial, y una garantía de que su futuro estará protegido.
La posibilidad de heredar las pensiones a los dependientes económicos en caso de fallecimiento y la cobertura para quienes queden incapacitados por accidentes, dentro o fuera del servicio, son medidas que demuestran la profunda preocupación del gobierno por el bienestar integral de los cuerpos policiales. Se trata de un compromiso con las familias de estos servidores públicos, un respaldo que les brinda la seguridad de que, en cualquier circunstancia, estarán protegidos.
El aumento del 2 al 21% en las aportaciones del Gobierno del Estado al Fondo de Pensiones, con un incremento gradual del 1% anual en las aportaciones de los policías hasta llegar al 9%, demuestra la responsabilidad financiera con la que se está abordando esta reforma. Se busca un equilibrio que beneficie a todos, sin comprometer la estabilidad económica de los integrantes de las instituciones policiales. Es un plan a largo plazo, pensado para asegurar la sostenibilidad del sistema y garantizar el bienestar de las futuras generaciones de policías. La entrega y firma de documentos de afiliación social a varios policías en un acto público, simboliza la materialización de estas promesas y el inicio de una nueva era para la seguridad en Oaxaca. Es un paso firme hacia un futuro donde la seguridad y la dignificación de los cuerpos policiales van de la mano.
Fuente: El Heraldo de México