La tranquilidad en el hogar de Maribel Guardia parece aún lejana. La disputa por la custodia de su nieto, José Julián, lejos de resolverse, se ha convertido en un intrincado laberinto legal con nuevos giros en cada esquina. Las declaraciones del abogado de la actriz, Saddam Castillejo, en el programa de Javier Ceriani, han arrojado luz sobre la complejidad del caso, desmintiendo la aparente conclusión del proceso y revelando detalles que ponen en entredicho la supuesta estabilidad alcanzada.

Lejos de ser una decisión definitiva, la entrega del menor a su madre, Imelda Garza Tuñón, se encuentra en un punto crítico, en medio de un proceso legal y un amparo interpuesto por la defensa de Maribel Guardia para evitar que la resolución se concrete al cien por ciento. La preocupación del equipo legal de la actriz radica en lo que consideran una omisión crucial por parte del juez: la existencia de una carpeta de investigación abierta contra Imelda Garza y una medida de acogimiento preexistente a favor de Maribel Guardia. Este hecho, según Castillejo, invalida la decisión del juez y abre la puerta a cuestionamientos sobre la legalidad del proceso.

La sombra de la investigación sobre Imelda Garza se cierne sobre el caso. Según el abogado de Guardia, la madre del menor no ha colaborado plenamente con las autoridades, limitándose a presentar estudios de un laboratorio privado que supuestamente la eximen de consumo de sustancias. Mientras los abogados de Garza buscan archivar la investigación, la fiscalía ha ordenado su reapertura, lo que añade un nuevo elemento de incertidumbre al futuro de la custodia.

En medio de este torbellino legal, la prioridad de Maribel Guardia, según su abogado, sigue siendo el bienestar de José Julián. La actriz se mantiene firme en su lucha por garantizar el "libre desarrollo de la personalidad" del menor, principio que considera fundamental para su bienestar. Castillejo no descarta tomar acciones legales adicionales si se considera que la progenitora representa un riesgo para el niño.

La capacidad económica de Imelda Garza para hacerse cargo de José Julián también ha sido puesta en duda. Castillejo afirma que la madre del menor no tiene un trabajo estable y que los gastos del niño son cubiertos por el abuelo paterno, habiendo sido Maribel Guardia quien los asumía previamente. Este detalle subraya la importancia del apoyo económico que la familia de Julián Figueroa brinda al menor.

Un intento fallido de mediación para establecer las visitas del niño con su abuela también ha salido a la luz. A pesar de la manifestación del propio José Julián de su deseo de continuar viendo a Maribel, no se logró ningún acuerdo, lo que ha llevado a la defensa de Guardia a centrar su estrategia legal en recuperar la custodia del menor y, posteriormente, buscar una custodia definitiva en la vía familiar.

Con tantas interrogantes sin resolver, la batalla legal por José Julián se perfila larga y compleja. Mientras tanto, el silencio de Maribel Guardia e Imelda Garza Tuñón tras la publicación de estas declaraciones añade un halo de misterio al caso, dejando al público expectante ante los próximos acontecimientos en esta triste historia familiar.