
2 de julio de 2025 a las 21:20
¡Alerta! Moto-extorsionadores acechan en CDMX
La tranquilidad al volante, o en este caso, al manubrio, se ha visto una vez más amenazada en la Ciudad de México. Un nuevo modus operandi de los tristemente célebres “montachoques” ha surgido, sembrando la incertidumbre y el temor entre los conductores capitalinos. Ya no se trata únicamente de autos que acechan en las vías rápidas, sino de ágiles motocicletas que, como depredadores urbanos, buscan su próxima presa, ya sea automovilista o motociclista.
Este fenómeno, que inicialmente parecía focalizarse en choques entre motocicletas, ha evolucionado. Los videos que circulan en redes sociales, como el compartido por la cuenta @cuartodemillamx, muestran una escalofriante realidad: estos delincuentes ahora también se atreven a provocar accidentes con automovilistas, ampliando su rango de víctimas y elevando el nivel de peligro en las calles. Imaginen la escena: la imponente Basílica de Guadalupe como telón de fondo, un símbolo de fe y esperanza, contrastando con la oscura maniobra de estos individuos que buscan lucrar con el miedo y la desesperación.
El testimonio de la víctima, relatado en la plataforma X, estremece. La certeza de que el choque fue intencional, la impotencia ante la vulnerabilidad, el alivio al ver que la cámara a bordo del vehículo disuadió a los agresores. “Quiero pensar que esos franeleros querían sacar dinero porque en seguida se atravesaron”, relata la víctima, dejando entrever la sospecha de una posible colusión entre estos actores y los montachoques. Un escalofrío recorre la espalda al pensar en la posible red de complicidades que podría estar tejiéndose en las calles de la capital.
La presencia policial, en este caso, parece haber sido insuficiente. Aunque los agentes se encontraban en las inmediaciones, el temor y la conmoción del momento impidieron a la víctima denunciar los hechos. Este detalle pone de manifiesto no solo la audacia de los delincuentes, sino también la necesidad de fortalecer la presencia policial efectiva y la confianza ciudadana en las autoridades.
La pregunta que queda en el aire es: ¿qué podemos hacer ante esta nueva amenaza? La respuesta es compleja y requiere un enfoque multifacético. Por un lado, es crucial la denuncia ciudadana. Cada video, cada testimonio, cada registro de estos incidentes aporta una pieza clave para comprender el modus operandi de estos grupos y para que las autoridades puedan actuar de manera más efectiva.
Por otro lado, es fundamental la prevención. Mantenerse alerta al conducir, especialmente en zonas conocidas por la presencia de estos delincuentes, es crucial. Instalar cámaras de seguridad en los vehículos, como lo hizo la víctima del incidente en la Basílica, puede ser un factor disuasorio. Además, es importante difundir información sobre este nuevo modus operandi para que más conductores estén preparados y puedan reaccionar de manera adecuada ante una posible situación de riesgo.
La lucha contra los montachoques es una tarea de todos. No podemos permitir que el miedo nos paralice. Debemos unirnos como ciudadanos, exigir a las autoridades que tomen medidas contundentes y, sobre todo, mantenernos informados y alertas para protegernos a nosotros mismos y a nuestros seres queridos. La seguridad vial es un derecho, y debemos luchar por él. La Ciudad de México no puede ser un terreno fértil para la impunidad y la delincuencia.
Fuente: El Heraldo de México