El escándalo que rodea a Valentina de la Cuesta y su madre, Karla, toma un nuevo y oscuro giro. Lejos de la narrativa de su reciente libro, donde exponen los abusos sufridos a manos de Sergio Andrade, ahora se enfrentan a acusaciones que las señalan como parte de una demanda laboral, razón por la cual, según el reconocido periodista de espectáculos Javier Ceriani, habrían abandonado México. La bomba informativa, detonada en una entrevista con el periodista Esly Fombona, ha generado un torbellino de especulaciones y un manto de incertidumbre que envuelve a la influencer y su madre.

Ceriani, con su característico estilo directo, no dudó en expresar su escepticismo. "No le creo a nadie", declaró, enfatizando la complejidad del caso y la existencia de información aún oculta. “Hay una demanda que nadie está hablando… un tema escabroso”, palabras que resuenan con la promesa de una verdad aún más turbia de la que se ha revelado. La expectativa crece ante la promesa de Ceriani de presentar próximamente a una persona directamente involucrada en el caso, lo cual promete arrojar luz sobre los rincones más oscuros de esta historia.

Mientras tanto, Esly Fombona, quien ha seguido el caso de cerca, aporta detalles cruciales. Según el periodista, la demanda laboral, inicialmente dirigida contra un hombre, se extiende a Valentina y Karla de la Cuesta tras la tramitación de unos amparos. Fombona, presente en el hotel donde se desarrollaron parte de los hechos, relata una serie de sucesos que sugieren una trama compleja: transmisiones en vivo, comunicaciones por correo electrónico, una supuesta cuestión administrativa que culmina con la clausura del hotel y la posterior difusión de rumores sobre Karla de la Cuesta, llegando incluso a ser tildado de "terrorista". Su testimonio añade una capa de intriga a la historia, planteando la pregunta: ¿son Valentina y Karla víctimas o parte de una trama mayor?

Fombona va más allá y vincula la huida de México de madre e hija con la existencia de un amparo tramitado presuntamente para protegerse de un posible arresto, un embargo, y otras medidas aún bajo investigación. Este dato, de confirmarse, daría un giro radical a la percepción pública de Valentina y Karla, quienes hasta el momento se han mantenido en silencio, sin emitir ningún comunicado oficial en respuesta a las acusaciones.

La sombra de la duda se cierne sobre la familia De la Cuesta. Su silencio, en contraste con la resonancia mediática del caso, alimenta las especulaciones. Fombona señala la peculiaridad de su reacción en comparación con otras víctimas de Andrade, como Marlene Calderón, Aline Hernández y Wendy Castelo, quienes no han optado por la misma vía. ¿Qué las diferencia? ¿Qué secretos ocultan?

El tiempo corre y la presión aumenta. La opinión pública exige respuestas. Mientras tanto, el misterio que envuelve a Valentina y Karla de la Cuesta se profundiza, transformando su historia de supervivencia en un thriller judicial lleno de interrogantes. ¿Se atreverán a romper el silencio y enfrentar las acusaciones? ¿O su silencio será la confirmación de una verdad aún más compleja y perturbadora?