
30 de junio de 2025 a las 02:15
Veracruz se blinda ante Barry
La amenaza de la tormenta tropical Barry mantiene en vilo a la costa veracruzana. Con el reloj corriendo hacia la tarde-noche de este 29 de junio, la tensión se palpa en el aire. La alerta amarilla decretada por Protección Civil para la zona norte del estado, la más cercana a la trayectoria prevista del ciclón, no deja lugar a dudas: el peligro es inminente. Las autoridades instan a la población a extremar precauciones y buscar refugio en los puntos designados. La cercanía del ojo de la tormenta, a escasos 55 kilómetros de Tuxpan, pinta un escenario preocupante, donde cada minuto cuenta.
Mientras el norte se prepara para el impacto directo, el centro del estado respira, aunque con cautela. La alerta verde, si bien indica que el ciclón se aleja, recuerda la necesidad de mantenerse alerta. Las lluvias, los deslaves y las inundaciones siguen siendo una posibilidad latente, exigiendo prudencia y vigilancia constante. El sur, bajo alerta azul, parece estar a salvo del peligro inmediato, pero la amenaza de crecidas en ríos y arroyos de respuesta rápida se mantiene. La lección es clara: la naturaleza es impredecible y la prevención es crucial en cualquier nivel de alerta.
La meteoróloga Jessica Luna, del Organismo Cuenca Golfo Centro de la Conagua, confirma la proximidad del fenómeno. Sus palabras, respaldadas por datos precisos sobre la ubicación de Barry, refuerzan la gravedad de la situación. En Xalapa, la capital del estado, la alerta resuena con fuerza. El alcalde Alberto Islas, al frente del Comité Municipal de Protección Civil, lidera los esfuerzos de preparación. Se han previsto albergues en Centros Comunitarios y la Aldea Merced, listos para recibir a quienes necesiten refugio. La coordinación entre las diferentes dependencias municipales es vital para asegurar una respuesta eficaz ante cualquier contingencia.
Las lluvias, pronosticadas entre 70 y 100 milímetros, amenazan con anegar la ciudad. El director de Protección Civil, Enrique Fonseca, no escatima en detalles sobre las previsiones meteorológicas. La persistencia de las precipitaciones durante hoy y mañana añade un elemento extra de preocupación. Cinco grupos de trabajo monitorean constantemente el nivel de ríos y arroyos, mientras las guardias permanentes se mantienen activas, listas para actuar en cualquier momento. La labor preventiva se extiende a las colonias del norte, donde el perifoneo alerta a los vecinos sobre el riesgo inminente.
Los parques, espacios de recreación en tiempos normales, se convierten en zonas de peligro ante la amenaza de caída de árboles. El acceso a El Haya, Cerro de Macuiltépetl, Los Tecajetes y Elisa Godos se ha restringido, una medida que podría prolongarse según evolucione la tormenta. El personal de Medio Ambiente patrulla los parques abiertos, instando a las personas a retirarse y buscar lugares seguros. Un llamado a la colaboración ciudadana completa el panorama: evitar sacar la basura a la calle para prevenir obstrucciones en el alcantarillado y minimizar el riesgo de inundaciones. La unión y la responsabilidad individual son esenciales para afrontar este desafío. Veracruz se mantiene en alerta, esperando el embate de Barry con la esperanza de que los daños sean mínimos y la solidaridad, una vez más, demuestre la fortaleza de su gente.
Fuente: El Heraldo de México